Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

inesperadas

Inés Saavedra

Inés Saavedra.

La primera característica de Inés Saavedra es que es mar, viene de un Montevideo con 12 kilómetros de costa. Tuvo la necesidad de romper con su vida y aprovechó el lanzamiento de su segundo disco para venirse definitivamente a España y decidió integrarse de verdad. Vive en la Coveta Fumà (El Campello), en un lugar con amplitud y silencio: ella ya era música desde que nació.

Lo más representativo de Inés es su versatilidad en el arte de la música. No compone para una edad determinada, fusiona géneros y estilos en distintas áreas. Es muy multidisciplinar, cada canción es un viaje de autodescubrimiento con resultados. Su timbre y expresión vocal es un gran valor que produce una sonoridad distinguible. Ella, antes de nada, es música, donde, dice, todavía le queda mucho por descubrir.

Su primer recuerdo musical era estar en los brazos su padre mientras le enseñaba a silbar. Luego hubo una progresión a nivel de conocimientos, exploración en la música y capitalización de todo lo aprendido, así como un proceso de madurez en lo personal, en lo musical, donde Terra llega a ser su primer disco en España. Por ello tuvo la misma sensación que cuando presentó su primer disco en Uruguay, el de las Las Casualidades No Existen.

Terra abre un círculo de un lugar donde ella quería llegar. El tema Terra confirma el hecho que le permite sentirse perteneciente a la tierra donde vive y por eso lo produce con letra en valenciano, que le hace estar más cerca del sitio donde ahora pertenece. Cada año, cuando regresa de Uruguay tiene la sensación de que vuelve a su casa. Su disco, si la pandemia lo permite, se presentará a principios de junio en un concierto con banda completa.

Además, tiene dos proyectos relevantes. Uno de música para la infancia denominado Epi epi A que se lo dedicó en su inicio a dos niños muy cercanos y allí empezó todo. Otro de música y poesía, que llamó Letras y Música, que arrancó con el poema Las abarcas desiertas de Miguel Hernández, al que luego sumó poemas de Mario Benedetti, Juan Ramón Jiménez, Alfonsina Storni o Pablo Neruda. Hubo un volumen II dedicado a poetas de la Generación del 27 y le queda uno pendiente a las mujeres poetas de esa época.

La música le ha acompañado en todos los momentos de su vida, por lo que aspira a convertirse en la banda sonora de tu vida.

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats