Travesuras de la realidad y el deseo

Los libros pueden ser entregados o recogidos en la calle Murcia, 1, en la ciudad de Alicante. | PILAR CORTÉS

Los libros pueden ser entregados o recogidos en la calle Murcia, 1, en la ciudad de Alicante. | PILAR CORTÉS / SHEILAPEDRO

Juan Cruz

Mario Vargas Llosa, que en marzo cumple 87 años, empezó su carrera literaria poniendo por escrito historias en las que había rescoldos de lo que había vivido, y ahí están, en Los cachorros, en La ciudad y los perros, en Conversación en La Catedral, en La tía Julia y el escribidor. El vendaval causado por Los vientos aconseja ahora una relectura.

Por eso, ABRIL (suplemento literario de El Periódico de Cataluña y El Periódico de España, ambos de Prensa Ibérica) le pidió a Carlos Granés, escritor colombiano, autor de Delirio americano (Taurus) y editor del reciente volumen El fuego de la imaginación (Alfaguara), que recoge la abundante dedicación de Vargas Llosa a la literatura ajena, que explicara aquí qué es para él Los vientos y cómo se ha podido incardinar en los recientes sucesos de la vida privada del autor de La verdad de las mentiras.

Esta fue la respuesta de Granés: «Quizá el debate que ha abierto Los vientos, un cuento de Vargas Llosa en el que pareciera estar trabajando con la realidad, más que con la fantasía, se entienda mejor si recordamos que el arte tiene cierto poder de anticipación. Y no porque los creadores sean videntes, sino porque en muchas ocasiones trabajan con el deseo. Ese pudo haber sido el caso de Vargas Llosa: utilizó sensaciones, vivencias, pulsiones que en ese momento eran solo eso, materia difusa, útil para la ficción, no para la vida, que se anticiparon a lo que luego se haría decisión consciente y racional. Ahí radica la verdad de las mentiras: muestra los deseos y las emociones que nuestra parte racional se niega a aceptar. Y en ocasiones, quizá esta, se convierte en un aliciente para la aventura y la acción».

Desde muchacho, Vargas Llosa se alimentó de la poesía (de libros que le robaba a su madre) y de la realidad. La ausencia del padre, recuperado cuando aún no era un adolescente, resultó un trauma que marcaría su vida y que se refleja en su obra más autobiográfica, El pez en el agua. Su libro La verdad de las mentiras es un viaje a la ficción de los otros; su obra sobre Juan Carlos Onetti es el viaje hacia el interior de la ficción ajena, teniendo en cuenta que sin realidad no hay ficción. Este es un cuento, una ficción, que Prensa Ibérica publica entero en las diferentes páginas web de sus diarios para que los lectores del suplemento literario juzguen ahora el ya polémico documento literario del premio Nobel hispano-peruano.