El colegio Párroco Francisco Mas de Crevillent recibió ayer en el Ateneo de Madrid el premio a la excelencia educativa que otorga la Fundación Mundo Ciudad en colaboración con la Asociación Española de Escuelas de Negocios. Este centro de Actuación Educativa Singular (CAES) ha sido galardonado por las buenas prácticas en la implementación de su proyecto pedagógico en Educación Infantil y Primaria, y tiene como objetivo la mejora de la convivencia escolar y el fomento del vínculo entre padres y madres y la comunidad educativa.

En la gala se reconoció a más de 50 entidades públicas y privadas que cumplen los estándares de calidad y perfeccionismo en escuelas de negocios, universidades o centros de formación, entre los que se encontraba el colegio crevillentino. En concreto, este centro cambió su metodología en el anterior curso con la renovación de la junta directiva, en la búsqueda de un modelo innovador inspirado en casos de éxito para atajar la conflictividad en el aula y potenciar la motivación del alumnado, ya que una gran parte de los estudiantes presenta dificultades de inserción escolar por encontrarse en una situación desfavorable derivada de circunstancias sociales, económicas, culturales o étnicas.

Según Alicia Clemente, directora del colegio, «con este reconocimiento cambiaremos las connotaciones que se tienen de nuestro centro, y creo que también se ha tenido en cuenta la labor social que hacemos», explica. De este modo, Clemente asegura que han logrado reducir de manera notable los conflictos en el aula y sobre todo se están rompiendo las barreras entre los padres y el colegio, con programas como el de grupos interactivos, donde familiares y docentes se unen para fomentar los juegos didácticos con los escolares. Por otra parte, han incluido el programa de Tutoría entre Iguales (TEI), donde los escolares resuelven sus propios conflictos sin necesidad del maestro, ya que los alumnos más mayores toman el rol de tutores de aquellos en niveles inferiores, tanto en Infantil como en Primaria.

Asimismo, para potenciar las relaciones entre el alumnado han diseñado tertulias dialécticas en castellano y valenciano, para favorecer el debate sobre obras literarias, como también el English Room, un aula donde se trabaja el inglés a nivel oral en distintos formatos, desde canciones hasta juegos. Por otro lado, un alto porcentaje de alumnos son de etnia gitana o de procedencia marroquí, con lo que en el último caso el profesorado se encuentra continuamente con una barrera idiomática. Por esta razón han desarrollado un programa de ayuda familiar para facilitar a los progenitores las herramientas a la hora de dirigirse a un organismo oficial o para rellenar trámites, como la solicitud de una beca.

De esta manera la Fundación Mundo Ciudad les ha otorgado este reconocimiento por la buena ejecución de un modelo educativo que busca hacer partícipes a la familia en el proceso, como también reducir la conflictividad y la tasa de abandono escolar. Con este premio aparecerán en el ranking internacional de los mejores centros de formación.