La rápida intervención de agentes de la Guardia Civil y de la Policía Local, así como la actuación de la psicóloga de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Crevillent, fueron claves el lunes por la mañana para evitar que un hombre cumpliera su amenaza de quemarse vivo.

Los hechos ocurrieron en torno a las 11 de la mañana en una vivienda de la calle Bolivia de Crevillent, muy cercana al Cuartel de la Benemérita. Los agentes de este Cuerpo fueron los primeros en llegar advertidos de las intenciones de un hombre de 41 años que se había rociado el cuerpo con gasolina. Según fuentes municipales, esta persona amenazaba con prenderse fuego y portaba un mechero en la mano. Los guardias civiles personados en el lugar trataron de convencer al hombre para que se relajara y mientras avisaron a la Policía Local para que dieran parte a las autoridades sanitarias locales, competentes en este tipo de sucesos.

Personadas en el lugar una psicóloga y una asistente social, la profesional sanitaria consiguió convencer al hombre de que desistiera en su intento, evitando así que cumpliera sus amenazas de quemarse a lo bonzo.

A continuación, esta persona fue trasladada en ambulancia al centro de salud y desde allí hasta el Hospital Universitario del Vinalopó, donde quedó ingresado en observación en la Unidad de Psiquiatría.

El hombre, nacido en 1979 y de nacionalidad española, podría padecer alguna enfermedad mental que le habría llevado a forzar una situación que fue atajada, primero por los agentes y después por los técnicos sanitarios municipales.