Mediados de diciembre y hay en el ambiente un silencio sepulcral hasta que de repente una parte del cementerio de Crevillent se convierte por minutos en un espacio para homenajear a los difuntos que hicieron por la cultura local. La Tertulia Artístico Literaria El Cresol conmemoró ayer una de sus actividades anuales más entrañables y emotivas a la vez. Como viene haciendo el colectivo desde hace 25 años, sus integrantes recitaron varios versos de poetas crevillentinos fallecidos en un acto público que esta vez estuvo marcado por la distancia social debido a la pandemia de covid-19. Esta representación supone una forma de mantener vivo el legado de recitadores ilustres del municipio alfombrero.

Integrantes de la Tertulia El Cresol recitando poemas, ayer, en homenaje a los fallecidos. | ANTONIO AMORÓS

El acto se viene desarrollando desde 1995 y comenzó como desagravio al robo del busto del cura y poeta Macià Abela en su lugar de honor en el cementerio de la villa. Según explica María Teresa López, vicepresidenta de El Cresol, hace más de dos décadas «destrozaron el mausoleo en su honor y como reparación del pueblo la Tertulia organizó primero un acto en el Teatro Chapí con una edición de todos los poemas de Macià Abela».

Crevillent recuerda a sus poetas desaparecidos

Desde entonces los miembros de la entidad así como todo aquel que lo desea, fijan un día, que suele ser en noviembre o diciembre, para homenajear a los escritores crevillentinos en el propio camposanto. En particular se elige la ubicación del nuevo mausoleo que en su día se construyó a Abela bajo suscripción popular por el artista Carlos Quesada, según reseña María Teresa López. Junto a la tumba del poeta se depositó ayer, además, un ramo de flores y se recitaron poemas de autores locales como el ya citado, Anselmo Mas, Joaquín Galiano, Joaquín Valdés, Paco Pastor, José Luis García «Guchi», Manuel Serna o Manuel Martínez Montoya.

Crevillent recuerda a sus poetas desaparecidos

Crevillent recuerda a sus poetas desaparecidos

Desde el colectivo este año no lamentan ninguna pérdida de poetas de la asociación a diferencia de otras lecturas que han sido particularmente tristes porque llegaron a fallecer hasta cuatro tertulianos que dejaron importantes vacíos en la agrupación. Sin embargo, en esta ocasión han querido reseñar cómo la crisis sanitaria por el coronavirus ha transformado la vida de los ciudadanos y han homenajeado también a todas las víctimas que ha dejado y sigue dejando la pandemia. De igual modo han mandado un mensaje de esperanza y han aprovechado la ocasión para mostrar que la Tertulia sigue su trabajo para alumbrar la cultura. En el camposanto intervinieron más de una docena de integrantes del colectivo cultural, entre ellos el presidente Josep Antoni Aznar y tres cresolano que recitaron composiciones propias en honor al acto al igual que lo hizo una menor, nieta de uno de los poetas fallecidos de Crevillent.