Contradicciones en la Conselleria de Transición Ecológica por un ave amenazada. Mientras la consellera Mireia Mollà anunciaba estos días en una visita a las Salinas de Santa Pola que la gaviota picofina debe protegerse así como su hábitat por estar en peligro de extinción, hay en trámite una modificación del catálogo valenciano de especies de fauna amenazadas que plantea la supresión de esta especie en el listado.
Así lo alertan desde el colectivo ecologista Amigos de los humedales del sur de Alicante (AHSA), que precisamente presentó hace unos meses alegaciones al Proyecto de Orden de la Conselleria por el que se modifican los listados valencianos de especies protegidas de fauna y de flora, que en estos momentos está en periodo de exposición pública.
Desde AHSA reclamaron que la especie permanezca como vulnerable. Indican que el Consell se ampara en un informe técnico que dice que se ha incrementado la población de este ejemplar para actualizar el catálogo y dejar fuera a la gaviota picofina (Chroicocephalus genei).
En respuesta, desde el colectivo señalan que esta especie ha crecido en el sur de la provincia de una forma acusada durante la temporada de reproducción de 2020, en el que en un solo año ha aumentado una tasa superior al 40%, pasando de 806 parejas en 2019 a un total de 1.386 durante la última temporada reproductora.
Aunque a simple vista este aumento hace estabilizar la especie, desde el colectivo achacan el incremento a factores coyunturales como las malas condiciones ecológicas de las colonias de la especie situadas en la provincia de Almería.
Luego también les han resultado atractivas las condiciones óptimas, de forma excepcional, de otros entornos como las lagunas de Torrevieja, que debido a factores puntuales como una pluviosidad alta por la Dana y las recientes fuertes lluvias han provocado un importante aumento del nivel de las aguas de esta laguna, y más alimento, formándose isletas y orillas inaccesibles que han facilitado la instalación de varias colonias de gaviota picofina.
Con esto el colectivo viene a decir que la especie ahora está estable porque el hábitat acompaña, pero debe seguir protegiéndose porque las condiciones pueden cambiar de un momento para otro.
En este sentido, la consellera Mireia Mollà apuntaba que más del 50% de ejemplares de esta especie están en las Salinas de la villa marinera y el Pinet y recordaba que está catalogada como Vulnerable, por ahora, ya que su departamento quiere suprimirla como reprocha AHSA. Mollà recalcaba que para que este tipo de especies vulnerables perduren en el tiempo o incluso vayan en aumento «se deben proteger, cuidar y poner en valor todos aquellos espacios donde viven» como son las Salinas de Santa Pola, las lagunas de La Mata-Torrevieja, El Hondo o El Clot de Galvany.
Desde AHSA exponen que la especie tiene una población estable de unas 700 parejas reproductoras al sur de la provincia, siendo uno de los principales enclaves para la especie en España, pero sigue padeciendo impactos importantes y por precaución aconsejan que se mantenga el estatus de Vulnerable.
Predadores que acaban con huevos y pollos
Una de las mayores amenazadas para la reproducción de la gaviota picofina es la gaviota patiamarilla, ya que suelen permanecer pasivas ante los ataques de sus pollos y huevos. Por la depredación se anotó un descenso de las colonias hasta en tres ocasiones en los últimos años. Otro de los motivos del abandono de está relacionado con las inclemencias meteorológicas en forma de lluvias intensas y bajada de temperaturas.
