Santa Pola apunta a los próximos meses para derribar el antiguo edificio de la Cruz Roja en Viguetas, donde se instala el mercadillo, y protegerá el aljibe del siglo XX de su interior. La Junta de Gobierno Local aprobó ayer el proyecto de derribo del antiguo edificio, que tendrá un coste próximo a los 34.000 euros, según explica el Ayuntamiento. Ya el pasado verano el PSOE reiteró la retirada del techo de amianto de este inmueble, e incluso entonces acusaron a la alcaldesa, Loreto Serrano, de mantener una "bomba tóxica". Si bien, el estado deteriorado de este edificio viene desde hace años. Compromís también alertó tiempo después del peligro para "la salud pública" de mantener en las condiciones actuales el inmueble.
El edificio estuvo ocupado antiguamente por la Cruz Roja y se encuentra en desuso desde el traslado a otro emplazamiento del núcleo urbano de la asamblea local de la organización humanitaria. A nivel municipal se derribará el edificio pero antes deberá realizarse el desmontaje del fibrocemento que recubre el techo, teniendo en cuenta que es un material tóxico que debe realizarse por profesionales en ese terreno y de una forma minuciosa para impedir que se expandan partículas.
La concejal de Infraestructuras, Trini Ortiz, indica que “esperamos acometer el derribo en los próximos meses. Es una obra delicada ya que primero hay que quitar el fibrocemento y tenemos que proteger el aljibe de principios del S.XX que hay bajo el edificio. Seguimos trabajando en la ordenación de infraestructuras y en la protección del patrimonio de Santa Pola”.
El aljibe se protegerá y se pondrá en valor, a través de un proyecto que está desarrollando el Museo del Mar por hallarse en una zona arqueológica. La superficie a derruir es de 417 metros cuadrados y ocupa un volumen de 1.375 metros cúbicos.
