El personal de limpieza de UTE Alicante en ocasiones realiza actuaciones que, si bien no son de su obligación, siente la necesidad de actuar. Situaciones ante las que cualquier ciudadano puede encontrarnos, pero que bien por el horario en el que se producen o bien por la dificultad de acceso a determinados lugares se encuentran los trabajadores de la limpieza con mayor frecuencia. 

Héroes con capa naranja

Uno de los operarios del servicio de limpieza de playas, Carlos H. rescató a un joven de poco más de 20 años de que se ahogara en Cala Palmera de Alicante tras recibir un fuerte golpe en la cabeza, consecuencia seguramente de la colisión con las rocas producida por una caída. Carlos H., trabajador de UTE Alicante, empresa concesionaria del servicio de limpieza y recogida de residuos de Alicante fue el salvavidas de «un chico que se hallaba flotando en el mar, en Cala Palmera y que había ido allí junto a unos amigos y su hermana», explica. Tras escuchar los gritos de socorro de los chicos, Carlos no dudó en correr para ver lo que estaba ocurriendo y atender la señal de ayuda. «Allí me encontré bañistas corriendo hacia el agua en rescate de un cuerpo. Fue de gran ayuda que lo sacaran del agua, cuando vi el golpe en la cabeza y el color morado de la cara del chico pensé que podría ser tarde, pero actué rápido, en estos casos los primeros minutos son fundamentales. Primero le abrí la boca y me aseguré de que la lengua no obstruyera las vías respiratorias realizándole la reanimación de compresiones. Para mi suerte reaccionó rápido, a la tercera compresión ya empezó a escupir agua, toser y convulsionarse, síntoma de que estaba reaccionando y oxigenándose», recuerda. 

Héroes con capa naranja

Los hechos ocurrieron el domingo 21 de agosto sobre las 18.00 horas, cuando Carlos realizaba su turno de limpieza de papeleras de playas. Al escuchar los gritos de auxilio Carlos no dudó en actuar: «Sabía lo que tenía que hacer porque tengo formación en RCP (Reanimación Cardiopulmonar) y desfibrilación», y resalta la necesidad de que todos aquellos compañeros que quieran realicen estos cursos de formación. «Durante nuestras jornadas laborales nos encontramos con casos de auxilio y es necesario estar formados para ello», afirma, y reconoce que «ya se que no es la primera vez que personalmente siento la necesidad de acudir a una llamada de auxilio de un ciudadano». 

Héroes con capa naranja

Pero Carlos no es el único empleado de UTE Alicante que ha auxiliado a un ciudadano durante su turno de trabajo, Verónica V. es trabajadora de UTE Alicante desde 2020 y cuando llevaba apenas un mes en la empresa presenció su primera llamada de socorro: «Estaba por la Plaza de Toros caminando hacia una papelera cuando escucho alboroto y al girarme veo que de una banda de cinco chicos tres de ellos se encontraban pegando a una persona. En ese momento de un golpe recibido cayó hacia atrás sin darle tiempo a poner las manos y golpeó contra suelo. Fui corriendo hacia allí y me lo encontré inconsciente en el suelo, pero respiraba. Gracias a que cuento con formación en el ámbito sanitario pude atender a ese chico aquella vez». Cuenta también que la situación de auxilio más reciente que ha tenido ha sido estas mismas Hogueras: «Estaba recogiendo los contenedores de basura de las barracas cuando vi que un hombre que siempre nos esperaba para tirar la basura de la barraca estaba en la carretera al lado de una mujer en el suelo muy morada. A la mujer ya le habían puesto en PLS, que es la Posición Lateral de Seguridad, pero no respiraba, sin embargo, lo intentaba. Como tengo formación sanitaria sabía lo que había que hacer así que le puse en boca arriba e intenté reanimarle. Cuando vino el SAMU vi que la habían conseguido levantar, esto quiere decir, que la habían reanimado. Finalmente me enteré de que había fallecido camino del hospital. Tienes miedo, pero ante todo tienes que actuar».

Héroes con capa naranja

Tampoco el de Verónica es un caso aislado, David F. B. rescató a dos personas mayores de que se ahogaran en la playa de San Gabriel. También en 2020 y entre otros casos más recientes socorrió a un chico al que le robaron por la noche, aprovechando que el joven había bebido y cayó al suelo golpeándose fuertemente la cabeza. «Fui corriendo a socorrerle y le taponé la herida hasta que vinieron los amigos y después los sanitarios. En ese momento no lo piensas, solo actúas para salvar o ayudar a alguien», cuenta David.

Junto a David, su compañero José S. O.: «He tenido varios altercados. En el que estuve con David les robaron la mochila a unas personas mayores y él y yo perseguimos a los delincuentes y se la pudimos devolver. Luego estas personas mayores contactaron con la empresa para darnos las gracias. Hay otros casos que he presenciado todavía más fuertes. En una ocasión estaba con mi compañera Ana María G. y a las 6 de la mañana presenciamos en la playa un intento de violación por parte de un chico hacia una chica. La mujer dormía en la playa y él intento abusar sexualmente de ella. Cuando fuimos la estaba asfixiando contra la arena para tratar de impedir que gritase. Lo retuvimos y llamamos a la Policía. No nos fuimos hasta que llegaron los agentes», comenta y se lamenta de que «igual en ese caso sí pudimos retenerle, pero nunca sabemos a lo que nos enfrentamos, podría haber llevado una navaja o algo y habernos herido o haber herido a la chica, me gustaría tener la formación necesaria para saber qué hacer ante heridas, paradas, etcétera porque pasamos mucho tiempo en la calle y todos hemos presenciado y presenciaremos casos que tengamos que actuar para auxiliar a alguien».

El servicio de limpieza de UTE Alicante, al estar en la calle durante una franja tan amplia del día y la noche, posibilita una mayor cercanía y un mayor contacto con los ciudadanos lo que lleva a tener que actuar en situaciones comprometidas. Estos son solo algunos ejemplos, pero hay que agradecer a todos los trabajadores de UTE Alicante que van más allá de su labor profesional y con su actitud demuestran día a día su compromiso con los ciudadanos y con Alicante.