El Ayuntamiento de Benidorm permitirá la actividad comercial o de restauración en las plantas altas de las vivendas situadas en el casco antiguo de la ciudad, dentro de un proyecto que pretende revitalizar el centro histórico y crear un área de ocio y oferta gastronómica siguiendo el modelo de la zona de la Iglesia de Altea o el Barrio de Alicante. Para ello, será necesario llevar a cabo una nueva modificación de las ordenanzas municipales, en este caso la de Actividad de Zona Terciaria, que hasta ahora sólo consiente la instalación de negocios en las plantas bajas del casco antiguo y no autoriza que haya anexos para instalar comedores. Este cambio de ordenanzas permitirá, además, legalizar la actividad de algunos establecimientos que ya están funcionando de este modo y fuera de las ordenanzas municipales en calles como Alameda, Alicante o Santo Domingo, según reconoció ayer el concejal de Comercio de Benidorm, Eliseo Yus.

El edil manifestó que el principal objetivo que se persigue es "optimizar los recursos" en antiguas viviendas del calles como las mencionadas anteriormente y otras como Santa Faz, Cosme Bayona, Sant Vicent, Sant Llorenç, Condestable Zaragoza, Quatre Cantons, Els Gats o calle Mayor, donde hay multitud de casas antiguas y con pocos metros en su planta baja, pero que podrían ser rehabilitadas y albergar restaurantes u otro tipo de negocios utilizando las plantas superiores para albergar comedores o espacios comerciales. Con este proyecto, Yus adelantó que el centro histórico podría dar "un importante giro a nivel empresarial" y, a la vez, permitiría la restauración y mejora de viviendas que ahora mismo están "cerradas y abandonadas y a las que se podría sacar mucho partido".

La modificación también permitiría a los establecimientos disponer de anexos en locales adyacentes o próximos, otra práctica que también prohíben las actuales ordenanzas en el casco antiguo de Benidorm y que es una realidad en muchos locales de restauración por la limitación de espacios.

Para llevar a cabo esta nueva regulación, el concejal avanzó que el Ayuntamiento creará una comisión de trabajo para sacar adelante el proyecto "en el plazo más breve posible". Aunque reconoció no tener cuantificado el número de negocios que en el casco antiguo podrían acogerse a esta práctica, Eliseo Yus indicó que, de cara al futuro, la medida podría expandirse a otras zonas de Benidorm en las que las ordenanzas tampoco contemplan estos usos, entre las que citó como ejemplo la Colonia Madrid, frente a áreas como la avenida Mediterráneo o las calles Ruzafa, Esperanto o Gambo, "donde sí está regulada y permitida" esta medida.

"Ocultismo con las licencias"

Por su parte, el PP local denunció ayer que el concejal tránsfuga José Bañuls dispone de un local que está funcionando como anexo a un bar en el centro "sin tener licencia y fuera de las ordenanzas". Además, criticó el "oscurantismo" del nuevo gobierno a la hora de conceder licencias de apertura, afirmando que "han dejado de llevarse a las comisiones informativas" y "se están poniendo multitud de obstáculos".