Inesperada y contundente. Así fue ayer la tromba de agua que cayó en Benidorm a las 14 horas y que anegó alrededor de un centenar de locales comerciales y restaurantes, convirtiendo parte de la avenida de Alfonso Puchades en un enorme río y sus calles adyacentes en barrancos que desembocaron en la playa de Levante.

Según la Agencia Estatal de Meteorología -cuya previsión para el día apenas daba una alerta amarilla en la zona- en 80 minutos se registraron 27,4 litros por metro cuadrado en Benidorm. La cantidad, nada habitual en la ciudad, generó también inundaciones y desperfectos en el barrio del Rincón de Loix (en especial en el camping La Torreta), obligando a requerir los servicios de bomberos para extraer el agua.

La playa de Levante quedó afectada por la fuerza del agua que legó desde los viales que acumularon mayor caudal. La arena de varios puntos la playa desapareció dejando a la vista desembocaduras de barrancos y el paseo lleno de lodo y suciedad.

La calle más afectada fue Doctor Llorca Orts. Hasta un metro de altura llegó a tener el caudal arrastrando motocicletas, objetos expuestos en locales comerciales, y piedras y suciedad que emergieron del alcantarillado.

La potencia con la que bajó el agua provocó que parte se desviara por la calle Gerona anegando restaurantes y parte terminara inundando establecimientos comerciales de la avenida del Mediterráneo.

Trabajadores de estos comercios explicaron que siempre que llueve de forma intensa en Benidorm tienen el mismo problema sin que jamás se haya buscado una solución para evitarlo desde el ayuntamiento.

En cuanto a las pérdidas, llegó a haber un comercio que cifró en 10.000 euros la cuantía a la que ascendería el género deteriorado. Está por cuantificar cómo afectó la lluvia a los vehículos aparcados en esta calle. A las 17 horas, dos horas después de la tromba, aún se podían ver vehículos con agua en su interior y grúas de seguros privados retirando motocicletas.

Los actos festeros previstos durante la mañana y el triatlón de Benidorm se realizaron sin problema al iniciarse la tormenta ya finalizados.

Desde el gobierno local informaron que hoy procederán a estudiar todos los desperfectos para fin de tomar las decisiones pertinentes a fin de que todo vuelva a estar en perfecto estado.

La tormenta, en todo caso, no se produjo solo en Benidorm. Recorrió la provincia con desigual intensidad generando diferentes problemas. En la Marina Baixa otro punto fuerte fue La Nucía. Allí el agua arrastró un murete hasta la carretera CV-70 obligando a cortar su circulación desviando el tráfico por las urbanizaciones.

También fue cortada la circulación de la línea 1 del Tram entre Alicante y Benidorm en varios tramos, aunque en La Vila Joiosa apenas cayeron 2 litros por metro cuadrado de agua y en el Campello 5,2 litros. El corte se mantuvo durante una hora aproximadamente por falta de la tensión en la vía, según informaron desde Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana.

Otras zonas de la provincia donde la lluvia cayó con intensidad fueron Agost -con 23,8 litros por metro cuadrado-, la pedanía alicantina de El Rebolledo (15,7), y poblaciones del Baix Vinalopó.

Pese a los desperfectos y cortes de tráfico no hubo que proceder a rescates ni lamentar heridos o daños personales de consideración, según informaron fuentes de los efectivos de emergencias.