La contracción de la actividad hotelera en la Comunidad Valenciana descendió debido a la pandemia de coronavirus un 69 por ciento durante el pasado julio, con un total de 1.129.971 pernoctaciones, muy lejos de las más de 3 millones registradas en el mismo mes de 2019.
Así se refleja en los datos difundidos este miércoles por la patronal hotelera Hosbec, con sede en Benidorm, según los cuales los ingresos por habitación disponible también se redujeron en un 60 por ciento de media. Del mismo modo, el mercado laboral vinculado se ha visto muy afectado, con una reducción del 50 por ciento en el número de empleados que han prestado servicios.
De esta manera, han trabajado durante julio 10.115 personas (-50%) en 929 establecimientos abiertos (el 80,7 por ciento de la oferta hotelera) para atender a 455.102 viajeros, lo que representa una caída del 56,3 por ciento en el número de turistas, con una estancia media de 2,5 días.
La capital turística de la Comunidad, Benidorm, perdió durante el pasado mes el 85 por ciento de las pernoctaciones, con un total de 192.061 estancias registradas en los 69 establecimientos que estuvieron abiertos abiertos. La estancia media de los viajeros fue de 3,1 jornadas.
En la Costa Blanca, las pernoctaciones cayeron un 74,9 (507.321), en la ciudad de València un 64,5 (158.247) y en Peñíscola otro 67,1 (99.998), según las mismas cifras aportadas por Hosbec.
