Los usuarios de las playas de Benidorm podrán acudir a partir del lunes a la playa de Levante sin necesidad de realizar una reserva previa de espacio, una de las grandes novedades aplicadas este año en el litoral benidormense con motivo del coronavirus. Así lo ha anunciado esta mañana el alcalde de Benidorm, Toni Pérez, que ha informado de que tampoco será necesario realizar una reserva presencial sino que se podrá acudir libremente como ya ocurre en los arenales de Poniente y el Mal Pas.

Esta decisión responde al descenso de ocupación previsto a partir de la próxima semana en la ciudad, que garantiza que habrá suficiente espacio para poder atender a toda la demanda en esta zona de costa.

Ahora bien, el Ayuntamiento mantendrá en funcionamiento tanto el control de aforo, control de accesos y la parcelación de la arena, en las mismas condiciones que se ha venido realizando desde que se reabrieron las playas el 15 de junio, tres meses después del cierre de las mismas por la declaración del estado de alarma por la pandemia de covid-19. Igualmente, también se mantendrán los dos puntos de Playas Accesibles para prestar servicio a personas con distintos tipos de diversidad funcional.

El sistema de reserva previa comenzó a utilizarse el 15 de julio y ha operado también todo el mes de agosto, tanto por medio de la aplicación Benidorm Beach Safety desarrollada por el Consistorio como en los puntos de reserva presencial diseminados a lo largo de todo el paseo de Levante. Si bien durante los primeros días hubo numerosas quejas por parte de algunos bañistas por la dificultad de encontrar espacios disponibles por medio de este sistema, el primer edil ha defendido su buen funcionamiento y los buenos resultados que ha ofrecido, "al dar cabida a todo el público, sin necesidad de hacer largas colas o de que la gente tuviera que volverse a casa, como ha ocurrido en otras localidades", ha afirmado Pérez.

En lo que llevamos de verano, las tres playas de Benidorm han albergado a 1,8 millones de usuarios, siendo la de Levante la de mayor demanda durante todas las horas de sol, y sin contar a quienes acudían únicamente a tomar un baño sin ocupar parcela o las personas que han acudido a pasear por la arena entre las 7 y las 8.45 de la mañana. El pico de mayor ocupación fue el 15 de agosto, cuando hubo un total de 46.610 personas a lo largo de toda la jornada en los arenales benidormenses.

Menor coste para las arcas públicas

Toni Pérez ha manifestado que, aunque inicialmente el coste de esta aplicación se presupuestó en algo más de 670.000 euros, finalmente el coste para las arcas públicas se verá reducido a "no más de 265.000 euros", puesto que la plataforma tan sólo ha estado operativa mes y medio, entre el 15 de junio y el 31 de agosto, y no desde el 1 de junio al 30 de septiembre como se preveía en un principio. Según el alcalde, cuando se diseñó el plan de playas seguras "se hizo una previsión de máximos", para poder disponer de fondos si el sistema requería operar durante toda la temporada alta, algo que a final no ha sido necesario al registrar una menor afluencia de la inicialmente prevista.