"Erte o Muerte". Este ha sido el lema que ha acompañado a la caravana de coches que este martes ha recorrido las calles de Benidorm en la que representantes de todos los sectores implicados en la actividad turística han hecho a modo de manifestación para reclamar ayudas para paliar los efectos económicos causados por la crisis económica del coronavirus.
A las 11.00 horas, la fila de coches encabezada por un autobús turístico donde se han reunido los principales representantes de las asociaciones empresariales ha partido del aparcamiento de Aqualandia para recorrer las principales avenidas de la ciudad. Con un mensaje claro reivindicando los Ertes para el sector y el sonido de vehículos, la caravana ha seguido hasta el parking de Terra Mítica donde se ha leído un manifiesto por parte de los organizadores.
La protesta ha sido convocada por entidades como las Asociaciones ABRECA y COBRECA (restauración), OCIOBAL (ocio nocturno y salas de baile), AICO (comercio y autónomos), AVIBE (agencias de viajes), APTUR (apartamentos turísticos), CAMPINGS (alojamiento turístico), TAXI (servicios de transporte público), AVALUPI (asociación valenciana de ludotecas y parques infantiles), y ADISLEV (asociación de empresas de distribución). También por HORECA, MÚSICOS, ARTISTAS, MUTE ALICANTE (movilización de técnicos del espectáculo), HOSBEC (asociación empresarial hotelera y turística de la Comunidad Valenciana), y ASTRA (asociación de autocares de Benidorm), junto con las empresas Benidorm Palace y la mayoría de proveedores de hostelería y comercio.
El manifiesto "Erte o Muerte, salvemos Benidorm" ha exigido al Gobierno, como una de las medidas imprescindibles para la salvación del sector turístico, "la prolongación de los ERTE para todos los sectores implicados en la industria turística y poder superar esta situación de paro económico, de la congelación del consumo y de la incertidumbre laboral y social".
"Consideramos que el Gobierno de Pedro Sánchez será el responsable de la destrucción de empleo y la desaparición de un tercio de las empresas del sector, que hoy en España suman más de 800.000 trabajadores cobrando los ERTE" y se preguntan "¿qué piensa hacer el Gobierno con ellos a partir del 30 de septiembre?".
Así indicaron que "en nuestro país y en caso de no aprobarse la prórroga de los ERTEs en el sector hostelero por ejemplo, se podría llegar a una pérdida de 700.000 puestos de trabajo, llegando incluso a superar el millón de empleos si se suman los puestos indirectos", advierten.
Con todo han mostrado su preocupación por el cierre de negocios que podría conllevar la no aplicación de estas medidas y, además, piden algunas ayudas o rebajas fiscales para poder afrontar un invierno que aseguran será "muy complicado".
