Cristales que permitan ver el mar y la bahía de Benidorm. El Ayuntamiento cambiará la conocida balaustrada blanca de la ciudad en el tramo del paseo Tamarindos, en La Cala, por vidrio de seguridad como el que ya se usó en la remodelación del Castell y que permite tener una visión más amplia desde el mirador.

Esta actuación forma parte de las obras de rehabilitación que el Ayuntamiento ha hecho en el final del paseo de La Cala donde ya actuó para mejorar el pavimento del mismo, deteriorado por el paso del tiempo y donde también se han restaurado las escaleras del paseo de que comunican con la playa. El cambio de balaustrada aún tiene pendiente el permiso de la Dirección General de Costas y consistirá en tres tramos de balaustrada, alrededor de 40 metros lineales de cristal.

La concejal de Patrimonio Histórico, Ana Pellicer, quien también ostenta la competencia de Participación Ciudadana, recordó que fueron los vecinos de la zona los que reclamaron en el consistorio la necesidad de mejorar el estado de las escaleras. Una vez entrados en materia, los informes de los técnicos municipales aconsejaron la realización de una obra de mayor envergadura para garantizar la seguridad de los transeúntes, que es «lo que se ha hecho» Una vez finalizados estos trabajos, el siguiente paso es acondicionar la balaustrada que, como se aprecia, necesita ser restaurada, indicó Pellicer. El concejal de Espacio Público, José Ramón González de Zárate, añadió que se han invertido más de 400.000 euros en la zona para renovar la sujeción del alcantarillado o el mobiliario urbano, entre otras actuaciones.