No pueden más y, para algunos, el nuevo cierre decretado por el Consell supondrá la ruina. Los hosteleros de La Vila Joiosa se han manifestado este lunes para reclamar más ayudas al sector y para mostrar su descontento ante las nuevas medidas decretadas por la Generalitat Valenciana para intentar parar el aumento de contagios. Cerca de 500 personas, según la organización, recorrieron esta mañana las calles del casco urbano cumpliendo con todas las medidas sanitarias y distancias de seguridad.

La convocatoria era a las 11 horas en el recinto del mercadillo vilero. Las nuevas restricciones que han entrado en vigor este lunes, y que no permiten las reuniones en vía pública de más de dos personas no convivientes, hicieron que en un primer momento, los hoteleros tuvieran problemas para realizar la protesta a pesar de que pidieron permiso a la Subdelegación del Gobierno el pasado jueves, finalmente, y con un amplio control policial, los representantes de estos negocios han podido realizar su concentración y llevarla a las calles pero garantizando cumplir todas las medidas: de dos en dos, con dos metros de distancia y con mascarillas.

Los hosteleros de La Vila Joiosa se unen en una protesta contra las nuevas restricciones

Los hosteleros de La Vila Joiosa se unen en una protesta contra las nuevas restricciones DAVID REVENGA

El municipio de La Vila cuenta con cerca de 260 establecimientos de hostelería cuyos representantes se han sumado hoy a la manifestación además de otros sectores como proveedores o repartidores, según explicó a este diario Pedro Juan San Juan, propietario del grupo Zerca con varios locales en la ciudad. También les acompañaron el presidente de Abreca (Asociación de Bares y Restaurantes de Benidorm), Javier del Castillo, y el de Cobreca (Asociación de Cafeterías de Benidorm), Pablo González, así como el diputado nacional Agustín Almodóbar y el diputado provincial y concejal del PP Jaime Lloret, y otras entidades.

Los hosteleros recorrieron la avenida Pianista Gonzalo Soriano, Juan Carlos I, la calle Canalejas hasta la plaza de la Generalitat y han terminado en la plaza de la Iglesia, en pleno casco histórico. Al finalizar el recorrido, San Juan leyó un comunicado en el que, entre otras cuestiones, se reclamaba al Ayuntamiento que se bajen o suspendan algunos impuestos municipales pero además que se deje en "stand by" la nueva ordenanza de Comercio en la que se obliga a los bares y restaurantes a adecuarse a nuevas normas estéticas como la colocación de tarimas en las terrazas. "Ahora mismo, no podemos hacer frente a eso. Si no hubieran cerrado la hostelería, estarían multando ya desde este lunes". Así añadió que "mucha gente estamos sufriendo" con la situación actual y el nuevo cierre del sector supone "otra puntilla" a unos negocios que ya estaban en muy mala situación económica.

Así reclaman a la Generalitat también más medidas de ayuda y que no pongan todo el foco en la hostelería: "yo limpio las mesas y sillas cada vez que viene un cliente y cumplimos con las medidas de seguridad; en los supermercados no limpian ellos los carros cada vez", indicó a modo de ejemplo. "No queremos nada más que otros sectores" sino que se les trate de la misma forma.

Visita al Ayuntamiento

Al terminar la marcha, representantes del sector han acudido al Ayuntamiento a reunirse con el alcalde Andreu Verdú y el concejal de Comercio, Josep Castiñeira. Allí le han hecho entrega de una carta con varias peticiones con las que ayudarles a afrontar la crisis económica que les está causando la pandemia. El primer edil les ha trasladado su comprensión en estos difíciles momentos y ha pedido "mantener la calma" y ha declarado que "solo juntos y unidos se encontraran las soluciones que beneficien a todos los sectores". Por su parte el concejal de Comercioha explicado las líneas de ayudas que se están llevando a cabo desde el consistorio con las que se buscan paliar los mayores efectos económicos en la hostelería vilera.

Los hosteleros en el Ayuntamiento de La Vila con el alcalde y el concejal de Comercio. Información

Por su parte, el PP de La Vila, en un comunicado, indicó que el portavoz popular Jaime Lloret ha recibido "numerosas inquietudes por parte de los hosteleros, principalmente la parada forzosa a la que se ven sometidos de manera injusta, lo que supone una falta de ingresos, que, ligada a la subida de impuestos y gastos hace que un negocia sea difícilmente viable en estas condiciones". Así el edil apuntó que “es totalmente lógico que el sector hostelero esté preocupado y molesto. Suben los impuestos, sube la cuota de autónomos, la tasa de basura y al mismo tiempo los ingresos desaparecen por un confinamiento forzado. ¿Quién en estas condiciones puede mantener en pie un negocio?”. Además afirmó que “es preocupante la pasividad del gobierno vilero. En Benidorm han aprobado 3 millones de euros en ayudas al sector y en Finestrat 2 millones. En Villajoyosa el gobierno cree que ha cumplido porque este año no cobrará la tasa de sillas y mesas. Se necesitan medidas urgentes”.