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Benidorm pospone a octubre las restricciones de tráfico a los vehículos en la zona centro

El proyecto de zonas de bajas emisiones dejará prácticamente las calles peatonales y solo podrán acceder los autorizados - La entrada se hará mediante un control de acceso con cámara

Una de las zonas ya marcada con acceso solo para vehículos autorizados, en una imagen de archivo. DAVID REVENGA

Un modelo de movilidad urbana de bajas emisiones contaminantes en el que el peatón cobre todo el protagonismo por encima de los vehículos. Ese es el objetivo que tiene Benidorm marcado desde hace años y que debería haberse materializado en el proyecto de zonas de bajas emisiones o, lo que es lo mismo, calles y avenidas con restricciones al máximo para el tráfico rodado. Una actuación que se ha retrasado hasta octubre, a pesar de que se iba a poner en marcha a principios de año, tras la petición de los sectores empresariales.

El Ayuntamiento de Benidorm lleva años con la intención de reducir al máximo los vehículos en el centro de la ciudad. Su modelo seguiría al de otras ciudades como Granada, donde funciona hace años, y se asemeja a «Madrid central». Es decir, dejar un área urbana donde el tráfico se reduce solo a vecinos y vehículos autorizados y donde los peatones son la prioridad. La resolución en la que se plasma este modelo data de agosto de 2020 y entonces provocó las críticas de la oposición. En ella se recogía que la fecha de su puesta en marcha sería en enero de este año, pero el concejal de Movilidad, José Ramón González de Zárate, explicó a este diario que se ha ampliado hasta octubre. La razón: una petición de asociaciones como la de comercios AICO para posponer la medida y que no supusiera otra piedra en el camino del sector que ya están en una situación complicada.

Pero, ¿cómo afectará la medida a los conductores? Pues que tendrán que dejar en muchas ocasiones el coche en casa o aparcar en zonas cercanas al área que quedará acotada. En concreto, la ZBE1 de Benidorm tiene una superficie de 63 hectáreas donde se restringe la circulación de los vehículos más contaminantes y se permite únicamente el acceso de determinados vehículos. La «pastilla» de calles la forman aquellas vías desde la avenida de Europa, un tramo de la calle Lepanto (entre avenida de Europa y calle Esperanto), Esperanto, Finestrat, Vía Emilio Ortuño, Ruzafa, Venus, Marte, avenida de los Almendros, Marqués de Comillas, un tramo de Jaime I, avenida Uruguay y avenida República Argentina; y Racharell y Armada Española (tramo comprendido entre avenida Racharell y avenida de Vicente Llorca Alós); y se cierra la delimitación con la línea de costa, volviendo de poniente a levante.

Velocidades mínimas

Toda un área en la que reducir la intensidad de los vehículos estableciendo medidas de restricción y dejando paso a residentes de la zona, el autoabastecimiento de las actividades económicas o el acceso de servicios públicos de transporte, seguridad y emergencias; y estos solo podrán hacerlo a 10 o 20 kilómetros hora. Además de aquellos que tengan autorización o vayan a un hotel.

Movilidad ha decidido dejarlo para dentro de unos meses pero no ha parado de poner en marcha ya algunas de las medidas para ir avanzando. Por ejemplo, las señales en muchas zonas ya se colocaron en el mes de septiembre con la intención de que los ciudadanos comenzaran a acostumbrarse, según explicó el concejal. Pero además, también se han instalado algunos controles de acceso a los que se unirán otros más adelante como el nuevo de la avenida Mediterráneo o los que ya estaban en Armada Española.

El concejal explicó que «si vives en La Cala tienes alternativas para ir sin pasar por el Paseo de Poniente», por ejemplo, y recalcó la necesidad de implantar esta medida para reducir la contaminación.

Acceso restringido ya en los enclaves más turísticos

Aunque la aplicación de la zona de bajas emisiones se ha pospuesto hasta octubre, la Concejalía de Movilidad ya ha restringido completamente el acceso, excepto para vecinos y autorizados, algunas áreas, como por ejemplo los enclaves más turísticos de la ciudad. La zona del Tossal de La Cala o La Cruz de Benidorm tienen cortado el paso a los vehículos no autorizados desde hace unas semanas y la señalítica ya avisa de la prohibición del paso al tráfico rodado. Allí se instalarán nuevos controles de acceso, un sistema que ya está en otras calles de la ciudad. La intención es que sean zonas en las que el peatón tenga prioridad garantizando al máximo su seguridad.

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