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La semana en que el turismo de la Costa Blanca perdió el miedo al virus

Los alojamientos cierran sus mejores siete días desde 2019, con ocupaciones por encima del 90 por ciento

Aspecto de la playa de Levante de Benidorm, en una imagen de la pasada semana. DAVID REVENGA

Los hoteles de Benidorm y el resto de destinos de la Costa Blanca vivieron del 16 al 22 agosto su particular «semana grande» con niveles de ocupación superiores al 90 por ciento. O, dicho de otro modo, alcanzando registros similares a la etapa previa a la pandemia.

Así lo ha asegurado este martes la patronal hotelera de la Comunidad Valenciana, Hosbec, quien ha señalado que «que el turismo le ha perdido el miedo al coronavirus es una realidad que venimos constando desde el inicio del mes de agosto, periodo en el que por fin se han empezado a registrar datos de ocupación que recuerdan a temporadas pasadas».

Benidorm, con un 85% de su planta hotelera en funcionamiento, obtuvo en la tercera semana de agosto una ocupación del 89,2%, 3,7 puntos más que siete días antes, y con picos del 92% de media durante los fines de semana.

Mientras, la media en la Costa Blanca se situó en el 91,6%. Por su parte, la provincia de Valencia registró en este mismo periodo una media del 90,7 y en Castellón llegó hasta el 93,5%.

Esta elevada ocupación durante la pasada semana permitirá, seguramente, que la ocupación se sitúe por encima del 80 por ciento de media mensual gracias principalmente al turismo nacional, que supone el nueve de cada diez reservas hoteleras, a lo que se suman otros mercados como el francés a la espera de que lleguen los británicos.

«Estos datos demuestran que se puede hacer una campaña segura, compatible con la normalidad y basada en un comportamiento generalizado de responsabilidad y precaución», ha afirmado el presidente de Hosbec, Toni Mayor.

Ahora bien, desde la misma patronal alertan de que ahora lo que preocupa a los hoteleros es septiembre, que presenta pocas reservas «y por ahora no reacciona». Mayor ha puntualizado que los hoteleros no son tan optimistas como algunos políticos: «Han sido solo 4 semanas de producción normalizada frente a 18 meses de crisis», y ha recordando que julio fue un «mal mes» con ocupaciones del 60% cuando lo normal sería superar el 90 y que la Comunidad Valenciana tuvo el 90% de la planta hotelera cerrada hasta junio, cuando se inició la reapertura de hoteles. «Indudablemente estamos contentos con la producción de agosto, sobre todo porque teníamos peores pronósticos en julio, cuando se tuvieron que poner en marcha nuevas medidas restrictivas, pero ahora la gran incógnita va a ser septiembre y el otoño, una vez que el turismo familiar regrese a ‘sus cuarteles de invierno’ por la Vuelta al Cole», afirma Mayor.

De hecho, las previsiones de ocupación para la última semana del mes muestran ya que el mercado afloja presión y se espera una ocupación entre el 75 y el 85 por ciento, a lo que se suma la incertidumbre por lo que ocurrirá en mercados como el británico o el Imserso de cara al otoño e invierno.

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