La joven de 26 años que se precipitó al vacío este martes por un acantilado cuando se hacía un selfie subida a la balaustrada del Castell de Benidorm continúa en estado crítico en la unidad de reanimación del Hospital General de Alicante.
Así lo confirmaron al cierre de esta edición fuentes del centro, que han explicado que la chica ingresó en muy mal estado debido a las lesiones sufridas por la caída y el tiempo que después permaneció en el agua, con su cuerpo golpeado por el oleaje y las rocas.
La rápida intervención de rescate permitió que el personal del servicio de socorrismo municipal y del SAMU pudieran recuperar las constantes vitales de la mujer, de origen ucraniano y que estaba de visita en Benidorm. Ahora, la esperanza es que tenga un rápido restablecimiento.