Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Jordi Julià, Silvestre Vilaplana y Modest Barrera, ganadores de los VI Premis Altea de Literatura i Investigació

El Espai Mirador del Palau Altea fue de nuevo escenario en esta edición, tras dos años sin celebrarse ahí por la pandemia

Los ganadores de los Premis Altea posan con los galardones.

La Villa Blanca volvió a ser este pasado sábado la capital de las Letras Valencianas Contemporáneas con la celebración de la Gala de entrega de los Premis Altea de Literatura i Investigació, que llegan a su sexta edición.

Ayer por la noche se volvió a celebrar la gala literaria en el Espai Mirador del Palau Altea tras dos años sin pisarlo a causa de la pandemia del coronavirus, que obligó a que se efectuara en otras ubicaciones y fechas (el 12 de noviembre de 2020 en el Centro Social, y el 19 de junio de 2021 en la Plaça de l’Aigua), pues la fecha habitual es en la víspera del Domingo de Ramos. El evento fue presentado por la periodista de la cadena autonómica À Punt, Vanessa Gregori, y amenizada, como en todas las ediciones anteriores, por la música en vivo de la Orquestra Blava.

A los Premis Altea de 2022 se habían presentado 131 obras, de las que 9 optaban al “Premi d'Assaig i Investigació Francesc Martínez i Martínez” dotado con 3.000 euros, 45 obras se presentaban para el Premi de Literatura Infantil i Juvenil dotado con 4.000 euros, y otros 77 originales accedían al Premi Carmelina Sánchez-Cutillas de Novel·la i Prosa Creativa dotado con 5.000 euros patrocinados por la Fundación Caixaltea. De todas las obras, los jurados de las tres modalidades eligieron como ganadoras las presentadas por Jordi Julià Garriga (Premi d'Assaig i Investigació Francesc Martínez i Martínez), Silvestre Vilaplana i Barnés (Premi de Literatura Infantil i Juvenil) y Modest Barrera Aymerich (Premi Carmelina Sánchez-Cutillas de Novel·la i Prosa Creativa). En la gala también se rindió homenaje póstumo a la pintora Juana Francés (Altea, 1924 – Madrid, 1990) con el Premi Estela d’Honor que se concede para reconocer la memoria de los creadores o escritores alteanos que, ya desaparecidos, han destacado y sobresalido vitalmente en el ámbito de la literatura, del arte o de la investigación.

La proyección en pantallas gigantes de una extensa muestra de la obra de Juana Francés estuvo presente durante todo el acto al que asistieron cerca de doscientas personas, de entre las que destacan Joan Borja, director de la Càtedra Enric Valor de la Universidad de Alicante; Aurora Serrat, concejala de Cultura del Ayuntamiento de Altea; José Miguel Cortés, presidente de la Fundació Caixaltea; Pilar Tébar, directora del Instituto Alicantino de Cultura Juan Gil-Albert; Verònica Cantó, elegida el día anterior como presidenta de la Acadèmia Valenciana de la Llengua; Mar Iglesias, presidenta de Radiotelevisión Valenciana À Punt; y Jaume Llinares, alcalde de Altea.

Joan Borja, “alma mater” de estos Premis Altea, agradeció a las instituciones Ayuntamiento de Altea, Fundació Caixaltea, Aila Edicions, Instituto Alicantino de Cultura Juan Gil-Albert, Acadèmia Valenciana de la Llengua, Cátedra Enric Valor de la Universidad de Alicante, y Generalitat Valenciana a través de la Direcció General de Política Lingüística i Gestió del Multilingüisme “por su apoyo y ayuda decisiva en el lanzamiento, y relanzamiento, que están teniendo estos premios de literatura e investigación”. De Juana Francés dijo que es “la gran pintora valenciana del siglo XX”, y agradeció a su familia que aceptasen el premio Estela d’Honor que se le otorgaba.

Los premiados y los patrocinadores de los Premis Altea. DIEGO COELLO

Un “sí” a las palabras y un “no” a la guerra

En la parte final de su discurso, Borja señaló que “en medio de tanta fiesta y gratitud como tenemos esta noche, sería un poco impúdico obviar que mientras nosotros celebramos jubilosamente la vida con nuestros Premis Altea, ahora mismo hay al lado una guerra con personas que mueren, gente mayor, niños y jóvenes que han de abandonar sus casas y han perdido, posiblemente para siempre, la vida que tenían con sus amigos y seres queridos”. Con estas reflexiones, el director de la Cátedra Enric Valor de la UA quiso rendir un homenaje “a las victimas de la monstruosidad de la guerra”, reivindicando también un “no a la violencia sino a la investigación, no a las bombas sino a la inteligencia, no a los cuarteles sino a las universidades, no a los uniformes sino a las batas blancas, no a las balas sino a los libros, no a los himnos sino a las canciones de amor…”. Su intervención la acabó afirmando que “desde estos Premios Altea 2022 quisiéramos sumarnos al noble ideal que Mahatma Gandhi supo definir en la frase ‘No hay caminos para la paz. La paz es el camino’. La ocasión merece precisar que con la paz, el conocimiento, las palabras y el arte de las palabras que es la literatura, hay que decir: Sí a las palabras, no a la guerra”.

Premio Estela de Honor

Llegado el momento de entregar el Premi Estela d’Honor a Juana Francés, la concejala de Cultura, Aurora Serrat, hizo una sinopsis de la vida y obra de la pintora nacida en Altea afirmando que “formó parte del grupo El Paso desde el momento de su fundación en 1957, junto a Pablo Serrano, Rafael Canogar, Antonio Saura y Manolo Millar, entre otros”. Serrat añadió que Juana Francés “fue la única mujer de este grupo esencial en la historia del arte español contemporáneo: un caso paradigmático en un contexto en el que la creación pictórica de vanguardia era dominada prácticamente en exclusiva por hombres. De hecho, su caso resulta también excepcional por ser una de las pocas pintoras valencianas que expone su obra en el extranjero, en espacios tan prestigiosos como el Museo de Arte Moderno de la Villa de París, la Fundación Calouste Gulbenkian de Lisboa, la Universidad Brown de Providence, Rhode Island, la Tate Gallery de Londres, la Bienal de Venecia o el Museo Guggenheim de Nueva York. Sin embargo, a pesar de esta proyección internacional, Juana Francés nunca rompió por completo los vínculos con el lugar de sus orígenes, y todavía son recordadas, por ejemplo, las exposiciones individuales que la autora realizó en la Galería Alcoiarts del pueblo antiguo de Altea en los años 1972 y 1973”. Finalmente, Aurora Serrat anunciaba que “por motivos de agenda con compromisos adquiridos anteriormente, los familiares de la artista no pueden estar entre nosotros”, aunque la directora de la galería de arte de Pablo Serano (marido de Juana Francés) y su nieta Valeria Serrano enviaron unas palabras de agradecimiento a través de un vídeo que se proyectó en la sala.

Premio de Ensayo e Investigación

El “Premi d'Assaig i Investigació Francesc Martínez i Martínez” se le otorgó a la obra “Perdre l’escriure. Cròniques particulars del món de les lletres (2006-2013)”, de Jordi Julià Garriga (Sant Celoni - Barcelona, 1972), un volumen integrado por más de ochenta textos ensayísticos relativamente breves sobre cómo era el mundo de la cultura y la realidad sociopolítica de los primeros años del nuevo siglo, cuando estalló la primera gran crisis económica del nuevo milenio, que transformó el mundo de la edición y, más o menos, también, el de la literatura.

El Trofeo Penell, escultura realizada por escultor Serafín Cortés, lo entregaba la directora del Instituto Alicantino de Cultura Juan Gil-Albert, Pilar Tébar Martínez. Esta señaló que “estamos aquí, en el epicentro de la cultura de la Comunidad Valenciana, para entregar el premio que el instituto que dirijo editará y publicará para darle difusión”. Tébar afirmó que “con este prestigioso premio que lleva el nombre del investigador alteano, abuelo de Carmelina Sánchez-Cutillas, el Gil-Albert reivindica su apuesta por el estudio y la recuperación de nuestro patrimonio fomentando el tipo de ensayo que devuelva la mirada a nuestro territorio”.

Jordi Julià es poeta, ensayista y doctor en Teoría de la Literatura y Literatura Comparada por la Universitat Autònoma de Barcelona, donde imparte estas materias. Dijo que “en los tiempos que corren, hemos de hacer todo lo que podamos por la Lengua” y afirmó que los Premios Altea “son relativamente jóvenes, pero gracias a estos galardones Altea consigue tener un eco en el ámbito cultural más allá de Alicante y del País Valenciano, y hace que escritores de otros lugares veamos en la convocatoria anual de estos premios un referente nacional de lengua y cultura compartidas. Gracias a estos premios, Altea también tiene un lugar en la cultura de los Países Catalanes”.

Julià aseguró sentirse “muy honrado de que ‘Perdre l’escriure’ haya sido distinguido con el ‘Premi d’Assaig i Investigació Francesc Martínez i Martínez’, no sólo porque siempre nos complace que nos reconozcan el trabajo lejos de casa, sino también, y muy especialmente, porque esta obra pueda publicarse en una editorial de tan valor como la del Instituto Alicantino de Cultura Juan Gil-Albert”.

El autor concluyó aseverando que “en el País Valenciano hay una sólida tradición de prosa ensayística que tiene en Joan Fuster su máximo referente. Ganar un premio de ensayo en el año del centenario del nacimiento de Joan Fuster es para mí una doble satisfacción, no sólo por el premio en sí mismo, sino por hacerlo en tierras fusterianas”.

Premio de Literatura Infantil y Juvenil

El “Premi de Literatura Infantil i Juvenil” se le concedía a la obra “La marca del temps”, de Silvestre Vilaplana i Barnés (Alcoy, 1969), licenciado en Filología Catalana y profesor de secundaria. De entregarle el Trofeo Aila, realizado por el Área de Escultura de la Facultad de Bellas Artes de Altea, se encargó el alcalde Jaume Llinares, quien declinó realizar declaraciones, tanto en este momento como después en la clausura de la gala tal como ha venido haciendo en ediciones anteriores.

Silvestre Vilaplana indicó que “es muy importante que los jóvenes se enganchen a la lectura y por eso es necesario crear novelas que puedan despertar su interés por leer. Es necesario trabajar con mucho cuidado las obras, tanto temáticamente como en el modo de estar escritas”, razón por la que el objetivo de la novela “era construir una narración que divierta al lector adolescente”. El premiado explicó que “La marca del temps” es una novela de intriga y misterio. “Los personajes de la novela atraviesan distintas épocas que van desde el siglo XIX hasta la actualidad buscando reencontrarse. Unos para poder estar juntos y continuar su relación amorosa, otros para intentar destruirlos. Es una novela donde la venganza, el amor, la intriga y los elementos esotéricos se mezclan para hacer que el lector acompañe a los protagonistas en una carrera a través del tiempo donde la muerte es un hecho muy doloroso, pero, sorprendentemente, no es el final”, aseguró.

Premio de Novela y Prosa Creativa

Finalmente se daba a conocer el resultado del “Premi Carmelina Sánchez-Cutillas de Novel·la i Prosa Creativa”. La obra ganadora era “Com és de gran el meu voler!”, de Modest Barrera Aymerich, nacido en Borriana (Castellón) en 1962. El Trofeo La mà del sol, escultura de Pepe Azorín, se lo entregaba el presidente de la Fundación Caixaltea, José Miguel Cortés. Este anunció que tras 12 años en el cargo como presidente de la entidad bancaria y su fundación, el próximo 6 de mayo dejará de serlo “porque así lo contemplan los estatutos”. Cortés se enorgulleció de que Caixaltea “esté apoyando desde el principio a estos prestigiosos premios, ya consolidados en la Comunidad Valenciana, financiando con 5.000 euros el que ahora vamos a hacer entrega, a pesar de haber pasado por dos crisis”.

Modest Barrera es doctor y profesor de Historia. Explicó que su novela “está ambientada en la posguerra en donde los protagonistas se sumergen en una relación epistolar obligada por la represión ejercida en aquellos tiempos: unas circunstancias que evidentemente no son propicias para el amor, sentimiento que puede ser liberador pero que, en la medida en que nubla la razón, también puede causar víctimas”. Añadió que “Com és de gran el meu voler!” es una obra “sobre los estragos de una guerra que prácticamente no dejó a nadie indemne, aunque el dolor de algunos fue mayor que el de otros, como por ejemplo las personas que se vieron obligadas a permanecer escondidas durante muchos años. Éste es el punto de partida y también el hilo conductor de una historia que comienza con una declaración de amor aparentemente imposible, la cual permite a los protagonistas revivir tiempos pasados, determinar responsabilidades, descubrir conjuras, intentar esquivar revanchas y, en definitiva, sufrir la miseria moral que les toca vivir pero de la que también son responsables”, indicó.

Barrera dijo que escribir sobre la guerra “supone también reflexionar sobre la vida, porque en las circunstancias más adversas es cuando se plantean los grandes dilemas morales”, y aseveró que premios como el de Altea “suponen no sólo un reconocimiento sino también un estímulo, por eso me siento doblemente agradecido. Es un honor formar parte de la lista de galardonados con los ‘Premis Altea’, y muy particularmente en el que lleva el nombre de Carmelina Sánchez-Cutillas”, concluyó.

Premios con voluntad de imprescindibles

La concejala de Cultura clausuraba la gala felicitando a los ganadores de los “Premis” gracias a los cuales “junto a los galardonados en las cinco ediciones anteriores, sois parte imprescindible en la consolidación de este proyecto y el enriquecimiento de nuestro patrimonio cultural. El nombre de Altea sigue ligado, con mas fuerza que nunca, a la literatura, la investigación, la imaginación y la creatividad. Los Premis Altea -añadió- nacieron con la voluntad de convertirse en imprescindibles de las Letras Valencianas Contemporáneas, y la buena acogida que han tenido todas las convocatorias celebradas contribuye de forma fundamental en el posicionamiento de Altea que vuelve al mapa de la cultura meridional valenciana con nuestra voluntad de hacerla capital cultural permanente”.

Aurora Serrat concluyó su intervención afirmando que “estamos decididos a ser un referente que impulse la creación literaria y la investigación con nuestra lengua. Creemos firmemente en apostar desde las instituciones públicas por la cultura y su fomento basados en las raíces, la tradición y la personalidad de nuestro pueblo. Estos premios con una de las dotaciones mas destacadas en cuanto a los premios literarios, se sustenta con el soporte y patrocinio de distintas instituciones a quienes agradezco su apuesta por la cultura y este proyecto”.

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats