El Ayuntamiento de Callosa d'en Sarrià no ha tirado la toalla pese a los graves daños sufridos en les Fonts de l'Algar como consecuencia de la borrasca Celia, que arrancó dos de los tres puentes del paraje, dejó seriamente dañado el tercero y arrastró árboles, barandillas y otras infraestructuras debido a la fuerza del agua.
En contra de lo anunciado inicialmente, el Consistorio ha vuelto a reabrir este jueves al público el paraje, aunque con unas infraestructuras muy precarias y con señales todavía visibles de la resaca de aquella tormenta.
Vallas, andamios y otros elementos de seguridad protegen las zonas de paso para evitar incidentes entre los visitantes que acudan estos días a les Fonts de l'Algar, uno de los grandes reclamos turísticos del municipio y también un lugar elegido por muchos vecinos de la Marina Baixa para ir a comerse la mona.
El alcalde callosino, Andrés Molina, ha explicado que se ha trabajado "muy duro" para poder reabrir de nuevo las fuentes, cuyas reparaciones auguró días atrás que tendrán un coste cercano a los 70.000 euros.
Mientras, desde el Ayuntamiento, han aplaudido a través de sus redes sociales que la "corporación municipal ha hecho grandes esfuerzos para recuperar de manera provisional la apertura del paraje de l'Algar".
Normativa
Para evitar cualquier tipo de accidente entre el público que acuda estos días al paraje, el Consistorio ha establecido distintas medidas de seguridad y una normativa provisional para el acceso a las fuentes.
Por un lado, estará prohibido el baño debido a la fuerte corriente que todavía lleva el río Algar a su paso por esta zona.
Igualmente, se ha establecido un circuito único de circulación, como ya ocurrió al inicio de la pandemia, por lo que los visitantes deberán seguir este itinerario marcado.
Por último, se han establecido distintas franjas horarias de visita, y también se recomienda acudir con calzado cómodo que evite resbalones o caídas.