Con la finalidad de conocer personalmente los espacios que se beneficiarán en Altea de la subvención estatal de algo más de 1,3 millones de euros dentro del Plan de Sostenibilidad Turística en Destino, el secretario de Estado de Turismo, Fernando Valdés, ha visitado este jueves el municipio en compañía del secretario autonómico de Turismo, Francesc Colomer. Ambos secretarios han realizado una visita institucional al Ayuntamiento de Altea, en donde han sido recibidos por el alcalde Jaume Llinares, la concejala de Turismo, Xelo González, y otros concejales del equipo de gobierno Compromís-PSOE. Las portavoces de la oposición, Rocío Gómez (PP) y Anna Alvado (Altea amb Trellat), han mostrado su malestar poco antes de llegar Valdés por no haber sido invitadas al acto ni haber recibido comunicación alguna de la visita del secretario de Estado de Turismo.
Como es norma en el Ayuntamiento de Altea, cuando lo visita algún dirigente por primera vez, se firma en el Libro de Oro del municipio, Fernando Valdés también ha escrito unas palabras en donde ha destacado que "Altea es un referente nacional en su apuesta por la sostenibilidad, la preservación del patrimonio y la convivencia del residente y el turista". En su comparecencia, el alcalde Jaume Llinares ha recordado que "el año pasado Altea y Benicarló fuimos los únicos municipios de la Comunidad Valenciana receptores del Plan de Sostenibilidad Turística en Destino".
En el caso de Altea, "tenemos una inversión cercana a los 4 millones de euros que estará financiada a partes iguales entre la Secretaría de Estado de Turismo, la Generalitat Valenciana y el Ayuntamiento". Llinares ha aseverado que los Planes de Sostenibilidad Turística "son una de las ayudas más importantes que ha recibido Altea para poder impulsar la renovación y la integración en la red DTI (Destino Turístico Inteligente) por lo que estamos muy agradecidos al Ministerio de Turismo y la Generalitat Valenciana". Con esta ayuda, el alcalde a indicado que “vamos a modernizar, humanizar y hacer más accesible Altea, unas inversiones para nuestros visitantes, pero también para la ciudadanía”.
Sobre el destino de las inversiones del plan de sostenibilidad, Jaume Llinares ha avanzado que "como primer pueblo de España con menos de 50.000 habitantes al que se le ha otorgado la certificación DTI, se va a implantar la sensorización y señalización inteligente de los aparcamientos públicos, la peatonalización de la calle Pont de Montcau entre Els Quatre Cantons y la Plaça de la Creu, la sensorización de la recogida de residuos sólidos urbanos, o la instalación de una red eléctrica inteligente".
Retraso de las obras del frente litoral
Tras estas explicaciones, al alcalde y los concejales han acompañado a Valdés y Colomer a visitar diferentes lugares del casco urbano que se mejorarán con las subvenciones estatal y autonómica. El recorrido lo han comenzado por el paseo marítimo, y cuando han llegado al Carreró del Astillero, donde se inician las obras de la segunda fase de rehabilitación del frente litoral, han pasado de soslayo en dirección al cruce Quatre Cantons y la calle Pont de Moncau. A la pregunta de Fernando Valdés sobre el estado de las obras, Jaume Llinares ha respondido que van con retraso: "tenían que haber estado acabadas a finales de mayo, pero las subidas de precios de los materiales han provocado varios problemas".
Las obras del frente litoral "están vivas porque el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) ha presionado al contratista, pues el ministerio fue quien adjudicó las obras y lleva a cabo la dirección de las mismas", indicó el alcalde. El problema es que la "empresa Torres Cámara ha presentado en dos ocasiones la paralización de la obra y la modificación del proyecto. La primera se le denegó en su totalidad, y con la segunda se ha llegado al acuerdo de prolongar las obras cinco meses hasta el 27 de octubre, fecha tope para su finalización", según Llinares.
La "parte tecnológica es la que menos incremento ha tenido, pero los hormigones y metales han subido muchísimo su coste, y eso ha provocado la paralización que ha habido en las obras”, ha aseverado el alcalde. Después del paseo marítimo, la comitiva se ha desplazado a pie hasta la plaza de la Iglesia, en el casco antiguo, en donde el templo parroquial también se “beneficiará” del Plan de Sostenibilidad con una iluminación creativa de su cúpula.
Convenio con Turisme
Por otro lado, aprovechando la visita del secretario autonómico de Turismo, Francesc Colomer, se ha firmado el convenio singular de colaboración entre la Conselleria de Turismo y el Ayuntamiento de Altea para la promoción turística del municipio. Este acuerdo, con una subvención de 50.000 euros, está destinado a la realización de acciones de marketing turístico entre las que se encuentran el fomento de Visit Altea y una subvención de 15.000 euros para el Castell de l’Olla que se dispara completamente desde el mar cada segundo sábado de agosto.
Jaume Llinares ha afirmado que esta ayuda económica "nos permite reforzar y mantener la imagen turística de Altea, así como las acciones que se llevan a cabo cada año". Por su parte, Francesc Colomer ha remarcado que Altea "es un ejemplo de renovación imparable, y con gran capacidad de visualización de un futuro ligado al medio ambiente, las personas, la hospitalidad, la cultura. Con todo ello, se convierte en una de las grandes imágenes exportables al mundo como pueblo mediterráneo en donde predominan esta cultura tan nuestra, la imagen de la cúpula, el casco antiguo, o el mar. Valores que se pueden encontrar siempre en Altea".
