La unión temporal de empresas formada por Fomento de Construcciones y Contratas y Grupo Bertolín ha iniciado las esperadas obras de ampliación del Hospital Comarcal de la Marina Baixa, una de las infraestructuras más necesarias en esta comarca y que no solo permitirá incrementar el número de camas de hospitalización, sino también duplicar la capacidad de algunos de los servicios más saturados, como las Urgencias, la UCI o los quirófanos. La Conselleria de Sanidad invertirá 47 millones de euros, más IVA, en este proyecto, que los ciudadanos de la Marina llevan esperando más de dos décadas.

Operarios de la empresa adjudicataria han cortado uno de los carriles de acceso al antiguo aparcamiento del Hospital, ubicado en La Vila Joiosa, para comenzar a apilar materiales y preparar el terreno donde se hará la unión entre el actual edificio y la nueva ala hospitalaria, una de las labores más complejas de las que están previstas en el proyecto y que, según fuentes del Departamento de Salud comarcal, se prolongarán casi con toda seguridad hasta bien avanzado el verano.

Como ya contó en su día este diario, después de barajar distintas posibilidades para llevar a cabo esta ampliación, la empresa adjudicataria se decantó finalmente por seguir un patrón por anillos; esto es, arrancando en la parte más próxima al actual edificio, uniendo todas las conexiones de cableado eléctrico, tuberías y otros trabajos internos, para desde ahí continuar por las siguientes crujías hasta la parte más alejada.

"Es la forma que se considera que va a generar las menores molestias a los usuarios y también a la propia actividad en sí del hospital", explicó entonces la gerente, que añadió que hay un único "requisito imprescindible" que desde Sanidad se ha impuesto a la UTE: "Que se respete al cien por cien la actividad hospitalaria y presencial".

Varios usuarios pasan junto a la zona del complejo que ya se ha acotado por las obras de ampliación. David Revenga

Una vez construida esta nueva ala vendrán las siguientes fases, hasta completar los 30 meses que tiene el proyecto como plazo de ejecución. Esto es, hasta el último trimestre de 2024, aunque Sanidad confía en poder rebajar este plazo finalmente a 27 meses. Entre ellas, la obra interior, dotar de mobiliario el edificio, hacer el traslado de los servicios que están previstos en este nuevo espacio y reformar las áreas del actual hospital para ampliar camas y los servicios que verán enormemente mejoradas sus instalaciones. Pero todo eso vendrá más adelante.

Por el momento, según han explicado fuentes sanitarias, los trabajos se centrarán en la conexión entre la zona antigua y la nueva, que es donde ahora se ha comenzado a trabajar, empezando a habilitar el espacio desde el cual partirá la nueva edificación.

En este nuevo edificio se habilitarán los servicios con mayor demanda y, por tanto, con más lista de espera. Entre ellos, las áreas de Radiología, Urgencias --generales y de Pediatría-, Urgencias ginecológicas y obstétricas -que además dispondrán de dos quirófanos propios para poder realizar cesáreas urgentes y otras intervenciones-, quirófanos para cirugías programadas, UCI, Oftalmología y una planta destinada a consultas.

Por lo que respecta a los quirófanos, se pasará de los ocho existentes en la actualidad a disponer de un total de 12, con un espacio para poder ampliar a dos más en caso de necesidad, y también habrá nuevas unidades de Cirugía sin Ingreso (UCSI) y de Reanimación Post-anestésica (URPA). En Urgencias, la previsión pasa por ampliar el número de boxes de los seis actuales a un total de 12; mientras que la UCI pasará de 12 a 18 camas para críticos, con posibilidad de también de ampliarlas. Asimismo, se dotará al centro de una nueva Unidad de Corta Estancia y de una nueva zona de diagnóstico por imagen, que dispondrá de dos salas de TAC, resonancia magnética, radiología convencional y mamógrafo.

El traspaso de todos estos servicios a la nueva ala permitirá ganar espacios en el actual hospital para ampliar unidades ya existentes. Entre ellas, las plantas de hospitalización, que ganarán 52 camas hasta alcanzar las 322 en total; así como el Hospital de Día, que pasaría de las 21 plazas actuales a poder disponer de 50.

Menos espacio para aparcar

Conforme avance la obra de ampliación, vendrá uno de los graves problemas que el Hospital había logrado solucionar hace ahora casi tres años pero que volverá a aparecer en escena: la falta de aparcamiento. Porque prácticamente el 80% del espacio del aparcamiento quedará ocupado con la nueva edificación.

La empresa adjudicataria de las obras ha alquilado unos terrenos colindantes que habilitará para aparcar temporalmente y, de esta forma, dar una solución provisional a este asunto, mientras que el Ayuntamiento de La Vila culmina la expropiación de nuevos terrenos para ampliar el aparcamiento.

Otra imagen del inicio de los trabajos de ampliación del Hospital de la Marina Baixa. David Revenga

Desde la dirección del Departamento de Salud han explicado que este nuevo estacionamiento se habilitará conforme vaya surgiendo la necesidad de más espacio, pero han matizado que por ahora no se considera necesario puesto que la afección en materia de aparcamiento es "muy escasa".

La infraestructura más urgente

La obra de ampliación del Hospital de la Marina Baixa es desde hace años la infraestructura más urgente por atender en esta comarca por parte de la Generalitat Valenciana, ya que el único hospital público con el que cuentan los 18 municipios se inauguró hace ahora casi 40 años, en 1986. Aunque desde entonces se han llevado a cabo algunas obras para mejorar servicios, ninguna de estas ampliaciones ha servido para poder incrementar el número de camas de hospitalización (270) ni de UCI (12), a pesar de que en todo este tiempo la población de la comarca, tanto empadronada como flotante por el turismo, no ha parado de crecer. Eso, unido a las múltiples promesas que se han venido sucediendo sobre este proyecto desde hace casi dos décadas, había acabado por desesperar a usuarios, sanitarios y ciudadanía en general.

Sobre todo, después de observar cómo el Hospital se colapsó por completo en varias fases de la pandemia, teniendo que derivar a pacientes a los dos hospitales privados de Benidorm y otros hospitales públicos de toda la Comunidad, al no dar abasto personal ni infraestructuras propias. Ahora, con la recuperación tras la crisis sanitaria, servicios como Urgencias vuelven a mostrar un evidente colapso, que urge de una vez solucionar.

La gerente del Departamento de Salud, Rosa Louis Cereceda, ha destacado este jueves que, tras tanta espera, los trabajos han comenzado "por fin" y ha confiado en que, a partir de ahora, "vaya todo rodado y no surja ningún problema que nos obligue a frenar el ritmo".