¿Qué mejor lugar para hablar de vivienda, urbanismo, sostenibilidad y diseño que en la última planta del que ya se ha convertido en uno de los iconos arquitectónicos por excelencia, como es el edificio Intempo de Benidorm? ¿Y qué mejores expertos para llevar a cabo este diálogo que los prestigiosos arquitectos Carlos Lamela y Roberto Pérez-Guerras y la reconocida interiorista Bea Vidal

El rascacielos de 202 metros de altura, que acogía esta semana el foro inmobiliario «Alicante Real Estate» organizado por INFORMACIÓN, fue el espacio idóneo para compartir opiniones y experiencias en una charla amena entre estos tres profesionales, que tuvo lugar tras la primera mesa redonda de la jornada.

La interiorista Bea Vidal, el director del Club INFORMACIÓN, Toni Cabot y los arquitectos Roberto Pérez-Guerras y Carlos Lamela. AXEL ALVAREZ

Tendencias y desafíos en sostenibilidad

Los retos de futuro en las áreas anteriormente mencionadas son numerosos: nuevas fórmulas de vivienda adaptadas a los cambios de la sociedad, necesidades post-pandemia, ciudades más habitables, eficiencia, sostenibilidad, urbanismo vertical, humanización de espacios... Y, por tanto, requerían de un análisis en profundidad. Y así se hizo aprovechando la celebración del foro. 

En términos de sostenibilidad, Carlos Lamela -arquitecto madrileño, cofundador y presidente ejecutivo de Estudio Lamela, una de las firmas de arquitectura más reconocidas a nivel nacional e internacional-, afirmaba que la arquitectura tradicional siempre había sido sostenible «porque se acomodaban al medio», pero todo eso se deshizo cuando llegó el estilo internacional. 

En cuanto a la ciudad de Benidorm, explicaba que «hace 30 años se discutía su modelo urbanístico porque era muy novedoso y generaba un gran impacto visual». Pero hoy, se pone como ejemplo de urbanismo sostenible. «España pasó a ser un país desarrollado gracias a la construcción y el turismo. Benidorm supo concentrar su crecimiento en unos puntos en altura, lo que resulta mucho más eficiente y sostenible: se ahorra en redes de infraestructura urbana, en energía, se reduce el transporte de personas… En definitiva, este sería el modelo de desarrollo sostenible para las ciudades turísticas». No obstante, Lamela aclaraba: «esto no quiere decir que haya que llenar la costa española de rascacielos, tenemos que aplicar siempre la arquitectura de la sensatez y el sentido común».

"Hace 30 años se discutía el modelo urbanístico de Benidorm porque era muy novedoso y generaba un gran impacto visual. Pero hoy, se pone como ejemplo de urbanismo sostenible". AXEL ALVAREZ

El alicantino Roberto Pérez-Guerras, -uno de los grandes nombres de la arquitectura española y artífice, entre otras muchas obras, del edificio que acogió esta jornada: el Intempo de Benidorm, la construcción más icónica de la ciudad y que se eleva en la zona de Poniente-, definía la vivienda como mucho más que una distribución de salas y habitaciones, «es como nuestra segunda piel. Un espacio que debe arroparnos y hacernos sentir felices».

El arquitecto señalaba que el plan general que se hizo en Benidorm lucha por la sostenibilidad y el medio ambiente. «Aquí no podemos edificar lo que queremos, nos tenemos que amoldar a unas normas». Indicaba, además, que «diseñamos los edificios muy verticales para recuperar abajo zonas verdes y de convivencia. En otras grandes urbes del mundo, los edificios son altos pero están muy pegados, aquí el aire circula con total libertad». 

Buena parte del diálogo entre los expertos se centró en la arquitectura post-pandemia. AXEL ALVAREZ

Arquitectura post-pandemia

Buena parte del diálogo entre los expertos se centró en la arquitectura post-pandemia. En este sentido, Bea Vidal, interiorista y decoradora de espacios, opinaba que el concepto de hogar ha cambiado radicalmente en la época del covid. «Gran parte de nuestra vida la pasamos en una casa o en un estudio, y cómo están diseñados esos espacios para vivir y trabajar es fundamental». La interiorista comentaba que, tras los meses de confinamiento, hubo un «boom» en la demanda de servicios de interiorismo: «la gente quería cambiar la decoración, la iluminación, contar con un espacio para teletrabajar, adaptar sus terrazas o balcones para poder disfrutarlos... Tantos meses sin poder salir de casa condujo a darnos cuenta de las carencias que tenía el espacio que habitamos».