Altea recurrirá ante el TSJ la suspensión del plan Bellas Artes

El Consistorio avanza que si pierde el recurso, asumirá la figura de agente urbanizador para gestionar directamente el plan que se aprobó inicialmente en 2003. El alcalde Jaume Llinares alude a la "responsabilidad de gobierno” para defender la continuidad de un proyecto que sería distinto con la nueva ley de suelo

Terrenos del plan parcial de Bellas Artes de Altea, en una imagen aérea obtenida a través de un portal web.

Terrenos del plan parcial de Bellas Artes de Altea, en una imagen aérea obtenida a través de un portal web. / INFORMACIÓN

“Por interés público y por no llegar a una mala situación para la planificación de futuro de nuestro pueblo, el Ayuntamiento está obligado a defender con responsabilidad el plan parcial de Bellas Artes y a la mayoría de los propietarios de los terrenos que lo promueven”. Con estas palabras, el alcalde de Altea, Jaume Llinares, ha dado a conocer este martes la postura del equipo de gobierno, formado por Compromís y PSOE, ante la sentencia del Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 1 de Alicante.

Dicha sentencia, fechada el pasado 12 de enero, declaraba nulo el Programa de Actuación Integrada (PAI) del Sector RS-8 Bellas Artes, condenando al Ayuntamiento alteano a declarar la caducidad del mismo y retirando la condición de agente urbanizador a la mercantil Promociones y Finanzas, SL, tal como avanzó INFORMACIÓN.

Llinares ha comparecido ante los medios de comunicación acompañado por el concejal de Urbanismo, José Orozco, y por el portavoz del grupo municipal socialista, Miguel de la Hoz, quien ha declinado intervenir en la rueda de prensa, dejando todo el peso de la intervención en el primer edil y el responsable del área urbanística.

El alcalde ha anunciado durante su intervención que el Ayuntamiento va a "recurrir la sentencia del juzgado de Alicante ante el Tribuna Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana en defensa de los intereses públicos, de planificación del crecimiento [urbanístico] de nuestro pueblo, y de los intereses de los propietarios de más del 95 por ciento de los terrenos del plan parcial de Bellas Artes”.

El contencioso administrativo fue promovido por diez de los 105 propietarios de los casi 300.000 metros cuadrados de terreno que ocupa el plan parcial de Bellas Artes, ubicado junto al casco urbano, entre la calle Benidorm (conocida popularmente como Costera del Gallo) y la autopista AP7, y entre la carretera comarcal CV-760 Altea-La Nucía en el Plà del Castell y la calle Alcoy por encima del Palau Altea y el campus de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad Miguel Hernández.

Según Jaume Llinares, los intereses del Ayuntamiento “son los legítimos. Espero que la Justicia nos dé la razón, pero en el caso de que no sea así, entonces sería el Ayuntamiento el agente urbanizador para llevar a cabo la gestión directa del plan parcial”.

La caducidad del plan deja fuera de ordenación dos importantes infraestructuras para Altea: el Palau, en la imagen, y la facultad de Bellas Artes de la Universidad Miguel Hernández.

La caducidad del plan deja fuera de ordenación dos importantes infraestructuras para Altea: el Palau, en la imagen, y la facultad de Bellas Artes de la Universidad Miguel Hernández. / Diego Coello Calvo

Por su parte, el concejal de Urbanismo ha explicado que la sentencia del Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 1 de Alicante, “obliga al Ayuntamiento a caducar el programa de desarrollo del plan parcial, pero nadie lo ha anulado”. En este sentido, José Orozco ha afirmado que “nadie de los recurrentes ha solicitado la suspensión cautelar, y por tanto no hay suspensión del plan parcial que fue aprobado inicialmente en 2003, y que tiene aprobada la recalificación del suelo con la ordenación pormenorizada definitiva en 2012, y con la reparcelación inscrita en el Registro de la Propiedad en 2013. Lo único que queda pendiente es la aprobación de proyecto de urbanización y su programación para llevarlo a término. Y esto es lo que ataca la sentencia judicial en contra del Ayuntamiento y el urbanizador, la mercantil Promociones y Finanzas, SL”.

El edil ha añadido que el proyecto de urbanización “se aprobó definitivamente en mayo de 2020. Aunque cuando se sometió a exposición pública, la compañía Iberdrola estableció que el punto de conexión para la red eléctrica debía ser la subestación de La Nucía como nuevo condicionante, con lo cual se ha retrasado esta primera aprobación definitiva porque el agente urbanizador ha tenido que tramitar los informes sectoriales de la Diputación Provincial debido a que el recorrido de la red eléctrica ha de ir por la carretera comarcal, y del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana porque atraviesa la autopista AP7”.

Necesidad de más viviendas y más suelo para construir

En el plan parcial de Bellas Artes se prevé la construcción de 1.200 viviendas aproximadamente. Orozco ha remarcado que “creemos que este plan es necesario para el pueblo de Altea. Primero, por la necesidad de una bolsa de viviendas para los jóvenes, pues el Ayuntamiento tiene ahí tres parcelas para construir viviendas de protección oficial. Segundo, por el estado de consolidación del Palau Altea y la facultad de Bellas Artes de la UMH. Tercero, por los nuevos proyectos como el Centro de Día comarcal. Y cuarto, por generar actividad y puestos de trabajo, teniendo en cuenta que el suelo disponible en Altea está prácticamente agotado”.

Por su parte, el alcalde ha asegurado que el Centro de Día “quedará como está previsto porque está en suelo dotacional. Hemos pedido la delegación de competencias para que el Ayuntamiento inicie la contratación del proyecto, y hace una semana informé a la vicepresidenta del Gobierno Valenciano de la actual situación de la sentencia judicial. En el caso de sentencia del TSJ desfavorable, habría un retraso en la construcción del centro, pero nada más”.

Jaume Llinares ha reconocido que el proyecto del plan parcial “no es el que hubiéramos hecho el actual equipo de gobierno Compromís-PSOE. Habría tenido algunas modificaciones respecto a la propuesta que estamos defendiendo ahora por responsabilidad. Es un plan parcial que lleva 20 años tramitándose y que ha dado muchos pasos que son vitales para el futuro de Altea. Entre ellos la ocupación del terreno dotacional que se hizo como el Palau y la Facultad de Bellas Artes, y que justificó el inicio de este plan parcial tras construirse y ponerse en marcha estas infraestructuras cultural y educativa”.

En el caso de una sentencia del TSJ contraria al Ayuntamiento, Llinares ha afirmado que “sería grave porque ya hay edificios construidos desde hace 20 años que actualmente siguen en uso público”. Y finalmente ha apostillado que habría “unos efectos secundarios que nos obligarían a iniciar nuevos procedimientos en todo el proceso de reparcelación porque ya están inscritos los terrenos en el Registro de la Propiedad”, además de comenzar “la tramitación de la nueva propuesta del plan parcial manteniendo la nueva zonificación aunque adaptada a la nueva Ley del Suelo en donde se contempla un 15 por ciento de terreno para uso público o dotacional, cosa que en 2003 era un 10 por ciento con la ley de esa época. Con lo cual, esto supondrá más gastos, más proyectos y más obligaciones para los propietarios con una ley del suelo más restrictiva que hace 20 años”.