Altea recupera el cultivo de la vid con 800 microviñas en el entorno del Molí dels Moros

Las viñas plantadas son de las variedades Malvasía y Faranná, adaptadas al clima mediterráneo y con gran valor enológico | El molino fue adquirido por el Ayuntamiento en febrero de 2019 y se sabe que es de origen andalusí

Alumnos del IES Bellaguarda de Altea plantando las microviñas en el Moli dels Moros.

Alumnos del IES Bellaguarda de Altea plantando las microviñas en el Moli dels Moros.

Casi dos años después de que se iniciase en el entorno del Molí dels Moros un proyecto de recuperación de microviñas con la formación de cepas sobre espaldera, Altea vuelve a tener en la margen derecha del río Algar una plantación de 800 viñas, de las cuales 600 son de la variedad Malvasía y las otras doscientas son Faranná. El concejal de Medio Ambiente, José Orozco, ha señalado que esta plantación "es una acción realizada de forma conjunta entre el Ayuntamiento de Altea y el viticultor Joan Cascant, que lo dirige, para plantar las variedades Malvasía y Faranná adaptadas al clima mediterráneo y con gran valor enológico".

Orozco ha indicado que “se ha contado con la estimable aportación de alumnos del módulo de agroecología del IES Bellaguarda”, y ha añadido que la actuación “va más allá de un proyecto puramente ecológico: congrega varios actores clave en el mismo, como es el conocimiento de Joan Cascant, el trabajo y disponibilidad de profesores y alumnos del ciclo formativo de agroecología del IES Bellaguarda, y la voluntad del Consistorio para recuperar la tradición, el patrimonio y la cultura local, en este caso agrícola”.

En este sentido, el concejal de Medio Ambiente ha afirmado que el proyecto de microviñas en el Molí dels Moros “es una acción que va mucho más allá de plantar una viña, pues se trata de rescatar un cultivo tradicional en nuestra zona recuperando el territorio y dando el valor patrimonial que merece esta zona tan importante para Altea”. José Orozco ha incidido en que es un proyecto “de difusión de la agricultura y la cultura vitivinícola con tintes didácticos en cuanto que el proyecto se hace en conjunto con el IES Bellaguarda. Una iniciativa que supone la mejor práctica para los alumnos. Sin olvidar, que plantación no es solo una acción agrícola, sino también medioambiental y de sostenibilidad”, y ha añadido que el siguiente paso “será vincular a un bodeguero local que pueda hacer vino de calidad con esta plantación que nace ahora por un proyecto ilusionante que iniciamos el 1 de junio de 2021”.

La plantacion de microviñas en el Moli dels Moros de Altea.

La plantacion de microviñas en el Moli dels Moros de Altea.

Una importante infraestructura hidráulica de origen medieval

El concejal ha resaltado, por otro lado, que en este proyecto “llevamos trabajando desde enero de 2020, un año después de que el Ayuntamiento de Altea adquiriese el Molí dels Moros, una importante infraestructura hidráulica de origen medieval, posiblemente de época andalusí, que es única en la Comunidad Valenciana por el mantenimiento de su bóveda. Después, en junio de 2021 iniciamos el arado y recuperación de los terrenos adyacentes al molino para plantar las viñas. Ha sido un trabajo algo largo en el tiempo pero muy ilusionante. Y ahora ve la luz con un antiguo viñedo que se recupera como el Ave Fénix siendo parte del valor medioambiental y de sostenibilidad de la zona”.

Sobre el Molí dels Moros, o Molí Vell, José Orozco ha explicado que “se trata de un molino único en la Comunidad Valenciana de gran valor debido al estado de conservación de su bóveda. Se sabe de la existencia del molino desde la Edad Media, entre los siglos VIII y XVII, cuando los árabes, grandes maestros del aprovechamiento del agua, realizaron el trazado de canalizaciones, acequias y regadíos para el florecimiento de la agricultura. En Altea existen un total de cinco molinos, pero es éste el que tiene más valor. Ahora estamos restaurando este antiguo molino medieval vinculado al Reg Vell d’Altea”.

Cabe señalar que en la Carta Pobla de Altea, fechada en 1617, se habla de la existencia de acequias como la del Reg Vell o del Molí que llevarían agua hasta la balsa de la alquería de Benimussa para hacer funcionar el molino. Actualmente se conserva parte de la balsa de agua, en parte soterrada y aprovechada para establecer campos de cultivo. La superficie total del molino y su terreno adyacente ocupa una extensión de 1.717,84 metros cuadrados, y dicha balsa triangular adosada al molino tiene unas dimensiones de 100 x 80 x 31 metros”.

Esta infraestructura hidráulica está ubicada en la margen derecha del río Algar cerca del puente de la autopista AP-7. En febrero de 2019 fue adquirido por el Ayuntamiento de Altea por un importe de 76.027,84 euros con la finalidad de declararlo como Bien de Relevancia Local, e incluirlo en el patrimonio histórico y público del municipio, “para consolidarlo en el futuro en su musealización como reclamo cultural, educativo y turístico por tratarse de un elemento diferenciador respecto de los pueblos de alrededor”, según ha recordado José Orozco.