Los creadores de The Good Wife The Good Wifehan cambiado sus apasionantes intrigas políticas y judiciales por el aterrador mundo de las posesiones demoniacas. Evil es la nueva serie creada por el matrimonio Robert y Michelle King y que recientemente se ha estrenado en España en SyFy Channel, aunque en Estados Unidos la primera temporada llegará a su final la próxima semana en la CBS. Quizá a más de uno, el mundo de lo paranormal y del terror puede parecer ajeno al tipo de tramas que suele contarnos la pareja, pero en Evil nos encontramos con muchas de sus señas de identidad de otras series. Desde un repertorio de actores secundarios que suelen ser habituales en sus estrenos televisivos, a la banda sonora clásica de David Buckley, así como su particular sentido del humor y la ironía. Hace unos tres años, los King se atrevían con el género de ciencia ficción, en Braindead y en la que, en tono de comedia, nos contaban una invasión extraterrestre en la Casa Blanca.

La protagonista de Evil es la doctora Kristen Bouchard (Katja Herbers), una psiquiatra que trabaja para la Fiscalía en el distrito de Queens en Nueva York haciendo informes sobre el estado mental de acusados en procesos judiciales, especialmente asesinos en serie. Un trabajo que tiene que compaginar con educar a sus cuatro hijas, mientras su marido trabaja como guía de alpinistas en el Everest. Como Alicia Florrick (Julianna Margulies) se puede considerar como una madre soltera, aunque hay algo en ella de la inocencia de la Maia Rindell (Rose Leslie) de The Good Fight. Cuando se queda sin trabajo, Kristen acaba siendo fichada para la Iglesia Católica por David Acosta (Mike Colter) aspirante a sacerdote y que se dedica a investigar posesiones demoniacas. Aunque es algo en el que ella no cree, David piensa que su escepticismo la convierte en la candidata perfecta para determinar cuando se encuentran ante una enfermedad mental o ante una persona realmente poseída. Encontrar la línea que separa el milagro del truco o el engaño.

Como en Expediente X, tenemos a la escéptica y al creyente enfrentados cada semana a fascinantes misterios, mientras otra historia mucho más grande se va desarrollando en cada capítulo. Razón contra fe. En muchos de los episodios se consigue dar una explicación racional y científica para explicar el misterio pero no se cierran las puertas a la duda y a que detrás de todo pueda haber algo más. Esta simbiosis entre la pareja en la ficción refleja la dinámica del matrimonio King en la vida real, ya que mientras él es católico practicante, ella es judía y no devota.

Completa el trío protagonista el personaje de Ben Shakir (Aasif Mandvi), que es como el MacGyver del grupo. El manitas con acceso a todo tipo de aparatos para buscar las respuestas científicas que buscan. Su origen musulmán y su condición de no creyente contribuye a dar mayor diversidad racial al reparto.

Detrás de Evil hay una gran metáfora sobre los tiempos que nos ha tocado vivir. Un mundo en el que todo el mundo parece haberse vuelto loco y vivimos rodeados por atrocidades. Los King parecen haber dado con la tecla al reflejar esa realidad como una película de terror y explorar dónde nace el Mal. Así con mayúsculas. Ellos tienen claro, por ejemplo, que encerrar a niños en jaulas en un acto de maldad, tal como hace la Administración del país en el que residen con los hijos de los inmigrantes. ¿Cuánto de este Mal es de origen humano o viene directamente de las profundidades del infierno? Una simple conexión a internet abre las puertas de nuestras casas a monstruos mucho más espeluznantes que los que podamos encontrar en una película de terror. Una de las tramas de esta primera temporada está inspirada en el personaje del Momo y esos retos virales que hace un año trajeron de cabeza a muchos padres que se veían incapaces de proteger a sus hijos de los peligros de la red.

Michael Emerson, el inquietante Benjamin Linus de Lost, vuelve a papeles de villano, en esta ocasión como el doctor Leland Townsend. Aquí interpreta a un verdadero agente del mal, una persona cuyo propósito es el de sembrar el caos y conseguir que el mundo sea un lugar peor en el que vivir. Como en sus anteriores series, los King se inspiran en titulares de prensa de casos reales para sus argumentos. No es casual el uso que los agentes del mal hacen de las redes para sembrar el caos cuando precisamente hay dudas sobre la injerencia extranjera a través de las redes en el último proceso electoral. Townsend es la voz de los populismos que tan pronto están salpicando el mundo con su odio hacia las mujeres, como a las personas de otras razas. No es ningún secreto lo críticos que han sido los King con el gobierno de Donald Trump. The Good Fight pasó muy pronto de ser una de las series más combativas contra la gestión del actual inquilino de la Casa Blanca. Así que Evil podría ser la metáfora del Apocalipsis.

Robert y Michelle King son dos de los creadores más cotizados del panorama seriéfilo actual. Paradójicamente continúan trabajando para la televisión en abierto y aún no han sucumbido a las ofertas multimillonarias del cada día más creciente número de plataformas. Con la excepción de The Good Fight, serie creada para la plataforma de suscriptores de la CBS. Mientras la mayor parte de sus series pueden verse en abierto en Estados Unidos, en España son ofrecidas como productos de gourmet por los canales de pago. Sus historias recuperan esa antigua magia de la televisión en la que cada semana al sentarse frente a la pantalla nos sorprenden con una nueva historia, en lugar de estirar y estirar como un chicle argumentos agotados. Evil ya ha sido renovada para una segunda temporada y la mejor noticia para hacer más llevadera la espera es que pronto llegará la cuarta temporada de The Good Fight. Eso sí con Diane Lockhart (Christine Baranski) como principal protagonista, ya que Rose Leslie no repetirá como Maia.