Un fuerte olor a petunias y flores acaba apestando la sala. Uno es un bruto, heredero del hierro de los barcos y el óxido de sus mamparas. A uno la mierda, literal y taxativamente, le ha acompañado toda su vida, así que (nunca mejor dicho) no ando para florituras.

Rezuman ratas los imbornales, un mundo relleno de roedores grises, negros, con sus filas indias, sus gritos y afición caníbal.... en cuanto pueden se comen a las crías vivas, desde la pata al hocico.., debe resultar excelente manjar.

Uno es un bruto, sí. En la cama, doblando somieres, machacándose contra el colchón débil y ocasional, sin vida después del alboroto. Intento apartar a los moscones que revolotean sobre las flores, cardumen sonoro. En esa misma zona cero cientos de zombis arrastran sus vísceras perseguidos por la cohorte de Asmodeo.

Podría hablar de fútbol, sí, una goleada histórica a un país histérico. Montaje de montajes, éter fugaz. Podría hablar de talones lastimados, vendas elásticas, cremas y potingues. Podría, pero me centro en la lujuria de los días, en el tremendo avatar de la lascivia elevada a su máxima potencia, en el calor sudado sobre todos los líquidos excretables, lecturas descompensadas o deseos imposibles. "Yo sueño que estoy aquí destas prisiones cargado, y soñé que en otro estado más lisonjero me vi".... guerra y paz en verano, guerra y paz en la muerte primitiva.

Sigo pensando que tanta flor apesta.......