Weston Rowe, de 39 años, de Omaha (Nebraska, EE.UU.), lleva tres años comiendo carne cruda tras investigar por su cuenta los beneficios para la salud que sólo la carne cruda puede aportar.

Su dieta consiste básicamente en ingerir carne de vacuno cruda, hígado crudo, pollo crudo e incluso sesos, todos ellos procedentes de granjas lecheras y avícolas locales y asegura que esta dieta le ha ayudado a mejorar sus niveles de energía después de sentirse "increíblemente agotado" llevando una dieta "normal".

"Yo diría que en este momento como el 99% de carne cruda fresca de granja y nunca me he sentido enfermo o indispuesto por mi dieta", aseguró Weston a Daily Mail. "Ya no como alimentos procesados y, sinceramente, tampoco puedo decir que los eche de menos", añadió.

El hombre comparte sus hábitos alimenticios en su página de Instagram y en Youtube (Real Natural Human Diet), donde no está exento de comentarios negativos.

A pesar de ser un firme creyente de su estilo de alimentación, Weston es plenamente consciente de la controversia que se genera su dieta, especialmente con alimentos como el pollo crudo, por el riesgo potencial alto de coger una intoxicación por salmonela.

"Es muy controvertido, pero creo que la carne cruda tiene un equilibrio natural de bacterias que funciona simbióticamente con nuestros cuerpos y tiene un propósito", explicó.