Ni siquiera hubo que evocar al Apóstol Santiago en otro final de infarto que sirvió para sumar la cuarta victoria de la temporada y comenzar a soñar con la posibilidad de clasificar al equipo para la Copa del Rey. Bastó con la inteligencia y los tiros libres de Llompart, la intimidación de Barnes y la versatilidad de Ivanov. Tampoco requirió la ocasión al mejor Singler -ayer sólo 6 puntos-, pero el partido se ganó a base de garra, de constancia, de remontar 12 puntos tras una mala primera parte, y, por supuesto, al gran trabajo de Vidorreta desde el banquillo. El Lucentum mantuvo la serenidad en todo momento. Un triple del inspirado Bulfoni a falta de 16 segundos (69-71) pudo poner nervioso al Lucentum de otras épocas, pero no a éste. Llompart se pudo delante de la línea de tiros libres y no le tembló el pulso para sentenciar una meritoria victoria en un pabellón con un ambiente ensordecedor.
Se vio obligado a remontar el Lucentum tras el descanso. Vidorreta lo tuvo claro. Pidió a su equipo más defensa y mayor presencia de Barnes. Tuvo lo que quiso. Un parcial de 2-10 dejó las cosas más de cara, pero el ciclón lucentino endosó otro escalofriante parcial de 0-8 con una gran acción de Kone con tiro adicional que hizo temblar al Blusens. Del 50-44 se pasó al 50-55. El panorama cambió de forma radical aunque el encuentro estaba encaminado a decidirse en el último cuarto. Y nadie dudaba que con un final de infarto.
El exlucentino comenzó a sentirse cómodo, una sensación que sólo le duró hasta que Barnes entró en combate. Dewar aportó mucho pese a jugar con molestias físicas. Cumplió en defensa y en ataque anotando la canasta del 65-69 cuando las cosas se ponían feas a poco más de un minuto. Una personal en ataque de Singler pudo dar fuerza al Blusens, pero la defensa fue perfecta y el equipo gallego se quedó sin anotar. Sí lo hizo el Lucentum con dos tiros libres de Llompart (anotó 6 de 6). Era el camino de un triunfo que se consiguió a base de lucha y paciencia en una de las canchas más difíciles de la ACB. Se jugó bien tras el descanso. Antes, el conjunto de Vidorreta dejó mucho que desear.
El Blusens no permitió que el Lucentum se acercara al aro en el primer cuarto, dejando a los alicantinos con el único recurso del triple para mantenerse con vida ante un rival que planteó una defensa en zona mortal para la suerte del equipo de Txus Vidorreta. Fue precisamente desde la línea de 6,75 donde Ivanov hizo daño en el primer cuarto poniendo al Lucentum con una renta interesante nada más empezar (6-12). Una técnica a Llompart da pie al Blusens para anotarse un parcial de 13-2 (19-14) que obliga al técnico lucentino a detener el juego ante el feo panorama que estaba viendo. Con Ivanov (9 puntos) como referencia ante el mal día de Singler, se llega al final del primer acto con 21-17.
La inspiración de Bulfoni (12 puntos en el segundo cuarto), la perfecta defensa del Blusens y el desconcierto del Lucentum convierten al Multiusos Fontes do Sar en una fiesta (41-29). Sólo el acierto en el perímetro de Stojic evitó que el partido quedara roto definitivamente. Hopkins demostró unos fundamentos exquisitos bajo el aro, algo que el Lucentum nunca pudo hacer en los dos primeros cuartos. Cualquier aproximación al aro del conjunto gallego quedaba ensombrecida con la sobresaliente defensa local. No era el día del juego interior y al descanso el marcador reflejaba un preocupante guarismo (43-34).
Otro panorama
Tras el descanso, el Lucentum varió el rumbo radicalmente. Un triple del mejor Llompart abrió el camino antes de ceder el protagonismo a Barnes. Cuatro puntos consecutivos del pívot y un parcial de 2-7 mete el miedo en el Multiusos. La herida al conjunto gallego se abrió más con una antideportiva de Washington sobre Freire -excelente el base- que bien convierte Llompart ante la lesión del brasileño. Aún quedaba más. Soberano tapón de Barnes sobre Junyent antes de dejar que el Blusens dejara su puesto de espectador para empezar a actuar. Llegó, pues, el 50-44 con una gran canasta de Bulfoni. El Lucentum respondió con contundencia. Parcial de 0-8 y a descansar. La defensa alicantina en el último cuarto y la sangre fría de Llompart desde el tiro libre concedieron al Lucentum su cuarta victoria de la temporada.
