Después de seis victorias consecutivas, el Lucentum volvió a tomar contacto con la derrota, una sensación que no acostumbra a experimentar el equipo de Vidorreta esta temporada. Ayer, tras muchos partidos esgrimiendo una sonrisa, llegó el momento de fruncir el ceño al caer ante un Barcelona que "mató" de forma lenta pero segura. No concedió el conjunto azulgrana margen para la esperanza. La baja de Ivanov cerró todas las posibilidades de dar la sorpresa en el Palau Blaugrana. La falta de rebote ofensivo, las elevadas pérdidas (21) y la falta de referencia en ataque condenaron a un Lucentum con carácter, luchador, pero insuficiente para ganar a un Barça que superó la prueba sin muchos alardes, haciendo lo justo para llevarse un partido plácido en el espectacular coliseo azulgrana.

A las bajas de Ivanov y de Luz se unió la indisposición de Ellis, que jugó pese a acusar una fuerte gastroenteritis. Con esas premisas, apostar a la victoria del Lucentum era sinónimo de poca cordura.

Fue a mitad del segundo cuarto cuando el Barcelona apretó el acelerador. Tomó una ventaja cómoda al descanso (31-20) y a partir del tercer cuarto sentenció el choque con un gran Lorbek. Mientras, el Lucentum aguantaba como podía sin olvidarse de defender. Minutos para Rautins (todavía bastante verde), para Jodar (apenas aporta nada) y para Stojic de "4", una posición en la que apenas saca ninguna ventaja.

Pese a las circunstancias, derrota honrosa del Lucentum. Ya supone un éxito tener la posibilidad de jugar, año tras año, en un pabellón como el Palau Blaugrana.

Llompart ejerció de líder en el primer cuarto con un resultado esperanzador. El Lucentum presentó batalla en los primeros diez minutos a base de lucha, de pelear el rebote y de mostrar su mejor defensa. No asustó la salida de Mickeal ni el temprano triple de Huertas. Una antideportiva sobre Stojic puso por delante al conjunto alicantino (7-8) en los primeros compases del choque. No tardó Eidson y Wallace en mostrar sus credenciales para colocar un 15-11 que provocó el primer tiempo muerto de Vidorreta. Era necesario parar antes de ir a peor. Fue el resultado del primer cuarto. El Lucentum plantaba cara ante un Barça todavía desperezándose.

Mantuvo el conjunto alicantino el pulso en los primeros minutos del segundo cuarto. Una gran canasta de Dewar tras asistencia de Ellis ponía el 21-17, pero a continuación el partido se quebró. Llegó la hora de Ingles. Siete puntos consecutivos del australiano y parcial de 11-2 (28-17) a falta de poco más de 2 minutos para el descanso.

Se hacía cuesta arriba el choque. Las pérdidas no ayudaban a mejorar la situación aunque el Lucentum defendía el rebote de forma notable. Un triple de Huertas ponía el 31-20 en el marcador. Escaso poder anotador y demasiados balones perdidos (12). Sin embargo, la defensa impedía la exhibición azulgrana. El equipo de Vidorreta estaba predestinado a perder, pero en ningún momento olvidó su sello: carácter y lucha hasta el final.

Tras el descanso, la balanza se desniveló más. Lorbek se lucía en el desquebrajado juego interior lucentino, el Barcelona convertía en canastas los rebotes y el conjunto de Vidorreta llegó a un 40-28 que lo dice todo. Pese a que Rautins suavizó la herida con un triple, de nuevo Lorbek y Sada elevan la ventaja hasta los 13 puntos en el final del tercer cuarto (46-33).

Máxima ventaja

Entró el Lucentum con poca convicción al último cuarto. La derrota era cuestión de tiempo, pero era necesario evitar la humillación. No ayudó a este propósito la defensa inicial del conjunto alicantino, que alcanzó su máxima desventaja (54-36).

Fiel a su filosofía, el Lucentum mantuvo la lucha. De nuevo Ellis anota un triple, Rautins lo secunda con otro para aliviar el marcador (56-42). Nadie pensaba en ganar a esas alturas, pero el Barcelona tuvo que sufrir cada canasta. Fácil no lo iban a tener, por supuesto. La baja de Ivanov les ayudó, pero el equipo de Vidorreta supo perder con dignidad en un escenario del que casi nadie escapa con una sonrisa.

Sin duda la ausencia del pívot búlgaro dejó al Lucentum sin ninguna posibilidad de conseguir la victoria en Barcelona. Pese a ello, el conjunto azulgrana sólo pudo anotar 65 puntos. Sufrió también la temible defensa lucentina (la tercera mejor del campeonato) aunque el ataque estuvo más que espeso. 21 pérdidas son demasiadas para soñar con sorprender al conjunto de Xavi Pascual.

Ahora espera el Madrid, el domingo en el Centro de Tecnificación (18 horas). Ivanov regresa y, posiblemente, Rafa Luz también. Las posibilidades de ser cabeza de serie en la Copa del Rey de Barcelona se mantienen intactas.