Cerca de 1.300 personas que han estado reforzando los hospitales y centros de salud de la provincia de Alicante durante toda la pandemia se fueron este martes al paro tras no renovar Sanidad sus contratos. Este personal pierde su empleo pero, sin embargo, la conselleria busca voluntarios para reforzar los «vacunódromos», sobre todo de cara a la inmunización masiva prevista para este mes de junio.
Según ha podido saber este periódico, en varios departamentos de salud de la provincia se está pidiendo a enfermeros, celadores y auxiliares administrativos que se inscriban en los denominados módulos para trabajar fuera de su jornada laboral en tareas de vacunación y cobrar así horas extra; una situación que critica el Sindicato de Enfermería, Satse. «Es contradictorio que se busque personal voluntario habiendo prescindido de tantos enfermeros y pone de relieve la carencia de personal que existe», lamenta Emilia Guevara, secretaria de Acción Sindical del Satse. Las listas de voluntarios se confeccionan semana a semana y se va llamando a la gente por orden alfabético. El tiempo que trabajan en la vacunación lo sacan de su tiempo libre, «por lo que las plantillas terminan agotadas», señala Guevara.
Además, Sanidad prescinde de estas 1.300 personas (3.251 en la Comunidad Valenciana) a las puertas del verano, cuando un mes más tarde se prevé contratar a 6.000 personas para que cubran las vacaciones de médicos y enfermeros. A un mes de que comiencen estas sustituciones, el plan de vacaciones aún no está cerrado, por lo que sindicatos y colegios profesionales advierten de que las personas que ahora han acabado los contratos covid están siendo ya reclamados por otras comunidades autónomas. El Consejo de Enfermería de la Comunidad Valenciana asegura que ha recibido durante la última semana «una multitud de ofertas de trabajo de hospitales, clínicas privadas, residencias y multinacionales de toda España». El Cecova alerta de que la Comunidad Valenciana puede sufrir una «fuga de talento» de Enfermería.
Consciente de las dificultades que va a haber para encontrar profesionales que cubran a todos los que se marchan de vacaciones, la Conselleria de Sanidad ha abierto una bolsa de empleo para que se inscriban todos los médicos que han terminado la formación especializada, así como los enfermeros que han concluido el grado este curso.
El sindicato CC OO califica de «disparate» la situación. «Repetimos los errores de otros años. El plan de vacaciones está sin aprobar y a un mes del inicio de las vacaciones prescindimos de más de 3.000 personas que van a ser llamadas de otras comunidades autónomas, sobre todo los médicos y enfermeros, ya que las bolsas de empleo están vacías», sostiene Rosa Atiénzar, responsable de Sanidad en este sindicato. La apertura de esta bolsa extraordinaria para quienes han terminados sus estudios de Medicina y Enfermería «es porque saben que no van a encontrar personal suficiente». Atiénzar recuerda que entre el personal que ha cesado ahora en junio, «había 80 médicos de familia, cuando es una especialidad muy deficitaria». Además, Sanidad ha prescindido del 70% de los enfermeros contratados en atención especializada que ahora podrían estar ayudando en la vacunación. «Al final se reduce todo a una medida económica. Se ha optado por reducir el gasto anteponiendo los criterios económicos a los de salud», lamenta Atiénzar. La dirigente de CC OO advierte además de que la oferta de horas extra para ayudar en tareas de vacunación en Atención Primaria sólo se puede ofrecer si no hay personas en bolsa a las que contratar.
Los hospitales y centros de salud de la provincia han perdido al 40% de las personas contratadas como refuerzo en el último año para hacer frente a la pandemia de covid. Sanidad ha renovado 2.015 contratos de los 3.309 que se han hecho en los centros sanitarios alicantinos.
El recorte es proporcionalmente similar al que aplicará el departamento de Barceló en Castellón, pero mayor comparativamente con la provincia de Valencia, donde se pierde un 32% de contratos. En el conjunto de la Comunidad Valenciana, de las 9.301 personas que han estado reforzando las plantillas de sanitarios en el último año, seguirán hasta final de año 6.050. El hospital de la provincia más castigado por la pérdida de personal es el de Elda, donde dejan de trabajar la mitad de los refuerzos. En el Hospital General de Alicante cesan el 45% de las personas contratadas y un 42% en el Hospital General de Elche.
