Las calificaciones en los institutos valencianos dejarán de ir de "insuficiente" a "sobresaliente" para volver a ser del 1 al 10. Así lo ha asegurado el conseller de Educación, José Antonio Rovira, en una comparecencia en Las Corts para explicar las líneas de trabajo de su conselleria en los próximos cuatro años.
La novedad sólo afectará a los institutos y no a los colegios, ya que la Lomloe obliga a mantener el "insuficiente" y "sobresaliente" para los CEIP, pero deja a elección de las autonomías los IES. Para Rovira, el sistema actual es "abstracto", ya que "no es lo mismo un uno que un cuatro (que se engloban en el insuficiente) y tampoco es lo mismo un nueve que un diez (sobresaliente en el actual sistema). Lo que si que tendrán que mantener es la evaluación personalizada de cada alumno aunque las notas cambien.
Rovira ha dividido su comparecencia de 50 minutos en las tres grandes áreas de su conselleria: Educación, Universidades, y Empleo. Ha comenzado defendiéndose de las críticas por las adjudicaciones de plazas docentes y el mal servicio de bus escolar. Para ello ha cargado contra su predecesora, Raquel Tamarit, de quien ha dicho que tuvo "intención de que el curso comenzara con problemas".
El conseller ha argumentado que el Botánic cesó a 27 cargos educativos (66 en toda la Generalitat) antes de que el PP llegara a la Conselleria, "cargos precisamente con responsabilidad en las adjudicaciones de docentes para evitar los problemas que han surgido". De los 13 subdirectores generales que tiene Educación, cesaron a 9, según Rovira, "para tener rédito político pese a negar el derecho a la educación del alumnado".
Adjudicaciones docentes
Los retrasos y problemas en las adjudicaciones de 22.000 profesores -algunos de ellos en vilo hasta pocos días antes de comenzar el curso- han sido uno de los principales focos de críticas para Rovira, tanto desde la oposición como de los sindicatos educativos. Hoy ha tenido tiempo para explicar lo sucedido.
Según Rovira, la adjudicación de vacantes se anuncia habitualmente entre el 27 y el 31 de julio. Sin embargo, este año tan solo estaban los listados de personal, sin el trabajo hecho. A esto se suma que (según Rovira) el Ministerio de Educación no pasó los listados de estabilización de interinos hasta el pasado 1 de agosto, con lo cual "era materialmente imposible tenerlo todo listo el día 3, y menos con la mitad de los cargos cesados y en sus casas".
El conseller asegura que a su llegada a la sede de Campanar se encontró con "tres bombas", "las dos primeras son que no había gente y los listados llegaron tarde, y la tercera un programa informático obsoleto". Las menciones de Rovira a este programa y a los "errores informáticos" han sido constantes para justificar el retraso en las adjudicaciones. Hoy ha explicado que ya en 2020 se planteaba que este programa debía ser modernizado "pero Educación entonces no hizo nada".
Rovira también ha explicado que estas adjudicaciones "no han sido como las anteriores" ya que Conselleria tuvo que realizar varias oposiciones totalmente nuevas para estabilizar a más de 9.000 interinos y cambiar de cuerpo al profesorado de FP con carrera universitaria. Pese a que los técnicos recomendaron al anterior Consell "testear" que este programa funcionara bien con estos procesos, tampoco se hizo. "Si el Botànic hubiera continuado se habría encontrado con los mismos problemas porque no había dejado nada preparado".
Por último ha explicado que las incidencias finalmente han sido solo de 400 personas de un total de 22.000 adjudicaciones, también que los centros han comenzado el curso con el 98 % de la plantilla; "lo normal en todos los inicios de curso, que siempre hay algún fallo", cuenta Rovira.
Transporte escolar
El segundo gran incendio que trata de apagar Rovira son los constantes retrasos y mal funcionamiento de parte del transporte escolar en la provincia de València. El conseller ha explicado que fue el Botánic quien dio el visto bueno a la oferta, pese a que asociaciones de transportistas denunciaban que estaba plagada de irregularidades, y que aseguraron que "no se puede hablar de incumplimiento hasta que entre en vigor el contrato". "¿Ahora qué hacemos señorías?" ha espetado a la bancada de Compromís.
Rovira, que ya sancionó a la empresa de autobuses, ha pedido disculpas a las familias afectadas y ha asegurado que "estamos recabando todos los datos para llegar hasta las últimas consecuencias y resolver el problema", pese a que esta misma mañana no ha podido dar una fecha completa de solución a las familias que protestaban en la puerta de conselleria.
Anuncios y medidas en Educación
El conseller también ha tratado la "chapuza del Botánic" que suponía el recorte de dos horas de clase a la semana, que Educación ha sustituído por un refuerzo de inglés y matemáticas a los IES con el personal suficiente. Rovira ha explicado que esto no supondrá "cambiar las condiciones laborales de los docentes".
El responsable del departamento ha defendido una educación pública "de calidad, libre de ideología, con libertad de elección de centro y par las familias, y con aulas seguras y donde se cuide la salud mental de los estudiantes".
Otro anuncio del conseller ha sido que recuperará la asignatura de Música en la ESO. Por último ha anunciado que auditará el plan Edificant para que funcione correctamente tras "el encarecimiento de los materiales y la burocracia que entorpece las obras en los centros".
Rovira también pretende modernizar las aulas valencianas (que están a la cola del país en tecnología) y para ello ha anunciado la creación de 8.200 aulas digitales, la compra de 60.000 equipos informáticos en primaria y una nueva web llamada "familia 3.0" que se pueda usar de forma más fácil a intuitiva.
Financiación para las universidades
Conseguir un Plan Plurianual de Financiación para las universidades públicas ha sido otro de los compromisos del conseller para esta legislatura. Se trata de un tema capital para los campus, que tienen las cuentas congeladas desde el año 2009 y ha supuesto la paralización de nuevos aularios, carreras o reformas muy necesarias para estos centros.
Rovira ya ha dotado a las universidades de 1.031 millones de euros (un 0,9 % del PIB autonómico) y ha asegurado que pedirá al Gobierno los fondos que debe aportar para llegar al 1 % del PIB que pide la nueva ley de universidades (LOSU).
Por último ha anunciado un impulso a las ayudas a la investigación y transferencia, y diseñar un plan de ciencia entre las universidades y organismos como el CSIC. Todo esto estaría dotado de fondos europeos que, según Rovira, el anterior Consell no reclamó.
Mejorar el empleo
El último asunto que ha tratado Rovira es el empleo, y ha criticado que el Botánic ha "improvisado" en este tema, al no hacer un buen diagnóstico de las necesidades del mercado de trabajo valenciano, con un Servicio Valenciano de Empleo "desnortado".
Ha anunciado que contratará 95 orientadores más hasta llegar a los 280 para ayudar a personas desempleadas a encontrar oportunidades laborales, y también ha anunciado un plan para cubrir 20.000 puestos de trabajo que las empresas necesitan. Creará además un "mapa del empleo" identificando las necesidades laborales en cada zona de la Comunitat Valenciana, e invirtiendo en formación en la que merezca la pena invertir.
Por último ha mostrado su preocupación por el elevado número de accidentes laborales que hay en la C.Valenciana, que se sitúa en cuarto puesto del estado, y ha anunciado que reforzará la Inspección de Trabajo y potenciará las campañas de prevención.