P or las manos de Donald Petrie han pasado actores tan reconocidos como Brad Pitt, Gene Hackman, Sandra Bullock, Whoopi Goldberg, Walter Matthau o el mismísimo Paul Newman. Algo común cuando uno se mueve como director por la megadimensión cinematográfica que es Hollywood. Hasta la fecha es el único director que puede comparar los míticos estudios angelinos con los de Ciudad de la Luz de Alicante, ya que estos días se encuentra rodando allí y en varios puntos de la provincia su próxima película «Mi vida en ruinas», una alocada historia sobre un viaje turístico por Grecia que protagonizan figuras hollywoodienses como la canadiense Nia Vardalos o el neoyorquino Richard Dreyfuss. Ayer comenzó la primera de las tres jornadas de rodaje que se desarrollan en pleno centro de Alicante, concretamente en las inmediaciones de la plaza de España, cortada parcialmente al tráfico hasta el próximo viernes.

Numerosos curiosos se concentraron a lo largo del día para poder ver de cerca el que es el primer rodaje de una película estadounidense en el corazón de Alicante.

«Me parece impresionante poder recrear Grecia en un sitio totalmente diferente a su país. Nos ocurrió algo parecido en "Mis agente especial", en la que la trama sucedía en Texas y se rodó todo en Nueva York. Es parte de la magia del cine», afirma Donald Petrie en declaraciones a INFOMRACION. Se le ve contento con Alicante. De cara al rodaje, destaca la luz y el clima de Alicante. También despliega una buena ristra de halagos hacia las dos actrices españolas que participan en su filme: María Adánez y María Botto, que ayer participaron en la filmación de diversas escenas. «Son tan profesionales como hermosas», destaca risueño. Tampoco pierde la sonrisa cuando se le pregunta por las principales estrellas de la cinta, a las que ya se le ve acostumbrado. Para él no supone ninguna tensión tener a su órdenes a un actor como Richard Dreyfuss. «¿Quién es Dreyfuss », chiste que repite cuando le nombramos a Tom Hanks, uno de los productores de la película junto a la empresa española Kanzaman y 26 Films. Ya un poco más serio, explica que desde que vio «American Graffiti» tenía ganas de trabajar con su paisano de Nueva York.

A Petrie todavía le quedan muchos planos por rodar en la provincia, tras su paso por localidades como Altea, Xàbia, Benidorm o Castell de Guadalest. Antes de volver a la faena comenta que en Estados Unidos todavía no es demasiado conocida la Ciudad de la Luz, «pero si la Generalitat continúa manteniendo su política de subvenciones para ponteciar que vengan rodajes no dudo que terminará por serlo». Los comercios y viviendas de los alrededores de la Plaza de Toros de Alicante lucen estos días carteles en griegos como parte de la ambientación. Los extras hacen de turistas, figuras muy habituales en la ciudad. Todo, bajo la batuta de Petrie, que a pesar de buscar la perfección en el plano y tener a todos controlados, no pierde los nervios ni un momento.

Respecto a Ciudad de la Luz, donde grabarán interiores en los platós, Petrie señala que «la verdad es que lo que tiene aquí Alicante podría ser el comienzo de un gran filón, ya que los estudios son inmejorables y están totalmente nuevos. En Hollywood está claro que hay infinidad de estudios pero algunos de ellos, como los de la Metro Golden Meyer están en el mismo estado que cuando se rodó "El Mago de Oz"».

La nueva óptica de la esquina de la calle Calderón, antiguamente la conocida tienda Tejidos Esteve, ha sido el lugar escogido para hacer de la agencia de viajes que forma parte de la trama de «My life in ruins», secuela de la exitosa comedia «Mi gran boda griega».