"El circo ha muerto, vamos a desenterrarlo", advierte Suso Silva, el trasunto de Nosferatu en "Psicosis", la obra del Circo de los Horrores que entre hoy y el domingo realizará cinco funciones en el Teatro Principal de Alicante. No se asusten, subraya el maestro de ceremonias de esta parada de monstruos, porque es un espectáculo apto para cardiacos, lejos del gore y la truculencia y más próximo al entretenimiento familiar.

"Es teatro porque contamos una historia, es cabaret porque es sensual y muy interactivo con el público y es circo y magia porque hay lanzadores de cuchillos, una mujer que camina por una cuerda, pero boca abajo...", relató ayer Silva en la presentación a la prensa en el teatro, para luego salir con sus terroríficas pero entrañables criaturas a la calle a asustar y a hacer reir a los transeuntes, alucinados de ver a dos sujetos cadavéricos con sierras eléctricas, hombres lobo o enfermeras ensangrentadas confundiéndose con la gente en las terrazas de la calle Castaños.

"Psicosis" bebe del terror gótico del siglo XIX, de los clásicos del cine expresionista alemán, de las películas de la Hammer, y combina poética con sustos, música con humor, lo bello con lo grotesco. "Intentamos recuperar al público joven que no va al teatro y limpiar de telerañas a un circo conservador y cutre", finaliza Nosferatu/Silva.