­Cormac McCarthy nos atiende afablemente, entre apuntes sobre gastronomía y la incipiente adolescencia de su hijo. Incluso señala que no hay necesidad de hablar de sus libros, que ya está todo explicado en ellos, y que mejor conversar sobre otros temas. Casi llega a convencerte. Hasta que alguien cuchichea por detrás que estamos frente a un «inmortal» y vuelves a la claridad: McCarthy es hoy la novela norteamericana, y junto a otros como Philip Roth o Thomas Pynchon (compañeros periódicos en la quiniela por el Nobel) conforma el cáustico retrato de una generación de difícil relevo.

Lleva usted tres adaptaciones cinematográficas a sus espaldas (Todos los hermosos caballos, No es país para viejos, La carretera) pero, por lo que tengo entendido, sólo ha participado activamente en el rodaje del último filme (El consejero).

Soy uno de los productores del filme. Quería ver el proceso y quería cerciorarme de que la película iba a ser fiel al guión. Pensé que la mejor manera para ello era estar en las localizaciones y en el set. Me dieron una pantalla para ver las tomas mientras se rodaban€ No sé si volvería a hacerlo porque me lleva mucho tiempo, llevo siete meses en Europa y para cuando vuelva a casa todo será un caos. Es difícil estar fuera tanto tiempo. Además tengo un hijo de catorce años. Hablamos por teléfono, pero no es lo mismo. Me ha dicho que se ha afeitado el bigote porque hay chicas a las que no le agrada. Chico listo.

¿Cómo va El consejero, su primer guión cinematográfico?

No puedo hablar mucho de ello. Estamos apenas a unos días para terminar. Tiene buena pinta, por lo menos lo que he visto, que he visto la mayor parte, parece estar muy bien. Pero todavía quedaría editarla y eso sería el paso final. No me llevó mucho tiempo escribirlo y fue hace poco. Lo escribí, luego vino el director y lo siguiente que supe fue que teníamos a doscientas personas en España esperando para rodar la película. Me sorprendió la rapidez del proceso.

¿Conocía usted España?

Viví aquí hace años. Muchos años. Bueno, suelo decir que he vivido en España, pero no es realmente España, he vivido en Ibiza. «Es un país separado» (en castellano).

¿Sabe qué tiene muchos lectores aquí?

Sí, sí. Es más, cuando vine por la tarde, había gente joven en la puerta esperando que les firmase un libro y para hacerse fotos conmigo. No estoy acostumbrado a eso.

¿Y a Javier Bardem?

Estuve con él en los Óscars, cuando estuvo nominado al mejor actor secundario. Caminé por alfombra roja con su madre. Fue extraño (risas).

Buena parte de su producción literaria se desarrolla en paisajes cercanos al western cinematográfico. Hay un director en concreto que me lleva mucho a usted (o viceversa) Se trata de Sam Peckinpah, (Grupo salvaje, La huida, Pat Garret and Billy the Kid).

No. No creo que exista ninguna relación entre Peckinpah y yo, aunque ocasionalmente la gente nos compara. Pero yo no lo veo en absoluto. Me gusta Grupo Salvaje. Es un gran filme. Pero también ha hecho películas horrorosas. Y él, aparentemente, era un hombre muy difícil (hace un gesto de beber).

Lo apunto porque en la obra de Peckinpah, hay constantes compartidas como la «violencia» ejercida por la Naturaleza, la que ponen de manifiesto los hombres, la frontera hacia el «salvaje» y transformador México€

Bueno, es evidente. Si quieres una película o un libro sobre México vas a tener violencia, porque están especializados en eso. Puede ser un país muy peligroso, tanto en el pasado como hoy. Yo he pasado mucho tiempo en México y no podría ir ahora. Creo que sería extremadamente difícil. Peckinpah se lo pensaría dos veces antes de rodar allí ahora.

¿Es el pesimismo otra característica de la literatura de McCarthy?

Soy pesimista, pero no infeliz. No me levanto por las mañanas y gimoteo (se lleva las manos al rostro). Creo que el mundo tiene problemas y que los tiempos que corren son difíciles. No me refiero sólo al tema financiero, que estoy seguro preocupa a mucha gente que no puede pagar sus cuentas y tienen hijos que criar. Ahora mismo, son tiempos muy peligrosos para el mundo, no sabemos lo que va a pasar. Si alguien viniese de otro planeta y les enseñásemos una corta versión del siglo XX€ Es de locos. No hay ninguna razón para pensar que las cosas van a mejorar y que todo acabará felizmente, eso me parece improbable. «Lo siento» (en castellano)..

No obstante, dentro de su obra, hay un atisbo de valores positivos encarnado, la mayoría de la veces, en la juventud (La frontera, Meridiano de Sangre, La carretera, etc.). La juventud que acaba barrida por el mundo adulto.

Creo, por ejemplo, que mucha gente piensa que La carretera es un libro muy deprimente, pero la verdad es que la historia trata sobre el amor entre el padre y el hijo. Creo que si el libro intenta reflejar algo es enseñar ese amor bajo las peores circunstancias. Si tú realmente quieres a alguien, si realmente quieres a tu hijo, no importa lo mal que vaya el mundo, te pegas a él, mueres por él, harías cualquier cosa por él. Eso no es tan malo ¿No? Esto habla bien de la naturaleza humana.

¿Así que la paternidad le ha cambiado? (McCarthy tiene un hijo de catorce años)

Nunca hubiese escrito La carretera si no hubiese tenido un hijo. ¿Sobre quién escribiría? ¿Sobre mi perro? Así que mi hijo es como el co-autor, él es la razón por la que el libro se ha escrito. Recuerdo que no me llevó mucho tiempo escribirlo, lo redacté casi todo en Irlanda, en una vieja casa. Trabajé mucho allí, escribía cada día cuatro libros diferentes al mismo tiempo. Dos o tres horas en cada uno. Por la tarde me iba a pasear con el perro, luego volvía y continuaba escribiendo. Fue muy agradable.

Hablando de juventud y pesimismo ¿Ha seguido usted las recientes manifestaciones y disturbios a raíz del 25-S?

No mucho, resumidamente en la televisión.

Si no he entendido mal, El consejero toca temas tangentes a la crisis financiera y al poder.

El consejero trata sobre gente que se deja llevar para conseguir dinero, que no tienen reparo para conseguirlo, para estar en el «negocio». Al final, no termina bien para nadie. Excepto para el personaje de Cameron Díaz, que gana un montón de dinero, se traslada a otra ciudad y vive feliz para siempre.

Como escritor en busca de experiencias ¿Ha recogido alguna inspiración en Alicante?

No tengo ni idea. Nunca se sabe. A veces recuerdas algo muy extraño y piensas esto es realmente interesante. A lo mejor en el momento no le prestaste mucha atención, así que no sabes, nunca sabes€ Pero Alicante es muy agradable.

Se ha barajado reiteradamente su nombre como candidato al Nobel ¿Qué piensa del asunto?

Bueno, en realidad no es un tema que me importe demasiado. Probablemente la gente no se lo crea pero, ya sabes, recibo muchas invitaciones para ir a recoger varios de estos «premios», pero no estoy realmente interesado en ello. Tengo una caja llena de estas cosas en alguna parte pero no sé dónde está.