Ayer se alcanzó el sueño de un pueblo, que es el sueño también que da título al filme: Sueños de sal, cuatro historias de superación de Novelda, fue galardonada ayer con el Premio Goya al mejor documental.

Al escenario subieron su director, Alfredo Navarro, y su productor, Jesús Navarro, quien tras dedicarle el premio a su hija señaló que «esta es una película especial, muy diferente. El beneficio es para Cruz Roja y Cáritas, para la gente que sufre en España, no solo en Novelda, donde se rodó, y al cual por supuesto dedico este Goya. Pero también se lo dedicamos a España y a todo el mundo», apuntó Navarro, quien también agregó que «nadie va a Cáritas, nadie quiere ver lo que pasa. Y falta leche, falta atún, faltan mantas... El documental se está poniendo en cines cerrados como en Benidorm, donde incluso han comprado una ambulancia con los 6.000 euros recaudados». Y pidió a los políticos atención a esta dramática situación, de crisis y de historias de superación, que es al fin y al cabo lo que cuenta Sueños de sal con sus protagonistas. «Esto no lo esperábamos nadie», dijo el director, Alfredo Navarro, visiblemente emocionado.

Por su parte, el alicantino Paco Sáez, quien firma el storyboard de Atrapa la bandera, también fue el ganador del Goya a mejor cinta de animación. No fue un galardón para él exclusivamente, sino para todo el equipo de esta cinta que vuelve a hacer historia tras su anterior éxito con Tadeo Jones. Sáez, de San Miguel de Salinas, ha trabajado para películas internacionales de Disney y otras grandes producciones.

No tuvo suerte, en cambio, la cineasta de Torrevieja María Lorenzo son su cortometraje de animación, La noche del océano, que se quedó a las puertas (Alike, de Daniel Martínez Lara y Rafael Cano Méndez, obtuvo el galardón). Y lo mismo ocurrió con el alicantino Luis Ivars, quien no pudo con la favorita: «Palmeras en la nieve», de Pablo Alborán y Lucas Vidal.