Con ocho orejas se saldó la segunda corrida de la Feria de Hogueras, en la que Enrique Ponce, López Simón y Roca Rey salieron por la puerta grande. El valenciano cortó dos apéndices, mientras sus compañeros de paseíllo se llevaron tres cada uno.

Enrique Ponce fue el primero de la terna y remató la primera faena de la tarde. Muy suave el torero al primer toro de Daniel Ruiz, flojo pero noble, al que toreó a media altura con mimo para, en el último cuarto de faena, bajar la mano derecha en tres tandas meritorias.

Cortó la primera oreja tras una estocada algo desprendida.

En el cuarto, Enrique Ponce cortó otra oreja que le garantizó la puerta grande tras una faena de cierto mérito rematada con poncinas finales que levantaron al público de sus asientos. Pinchazo y estocada caidilla para acabar con el boyante astado de Daniel Ruiz.

Sorprendió López Simón durante la faena de muleta al segundo de la tarde. Un animal que apenas recibió castigo en varas y repitió incansable a la muleta del torero madrileño.

Interpretó el toreo fundamental con mucha quietud y mano baja, aunque llegó más al público con los pases de pecho invertidos y algunos circulares. En el centro del ruedo recetó una estocada contraria muy efectiva y se llevó las dos orejas del toro, que es premiado con la vuelta al ruedo.

En el quinto toro se llevó un trofeo. Un astado algo rebrincado que se movió bastante y al que el torero no acertó a dominar siempre. Pinchó en la suerte de recibir y cobra luego una buena estocada.

Roca Rey cortó un apéndice al tercero del festejo y primero de su tanda. La escasa presencia y empuje del tercer toro de Daniel Ruiz impidió la emoción en la lidia. Sólo subió la temperatura en los alardes circulares del final de la faena.

El público respondió al toreo final sin espada y sobre todo a un gran espadazo marcando los tiempos. Oreja con petición de otra, desatendida por el presidente.

En el sexto, cortó dos trofeos sumido en el triunfalismo de la tarde por una faena muy irregular en la que sólo llegó a los tendidos cuando pisó terrenos comprometidos al final de la faena y remató de una gran estocada.

Ambiente estupendo el que se respiró en la segunda de feria con lleno en los tendidos y tarde soleada.

Entre los asistentes, Cayetano Martínez de Irujo, Fernando Sánchez Dragó, Arévalo o el tenista Juan Carlos Ferrero, al que Ponce le brindó el cuarto toro.