Tito es un niño de 10 años que vive en Madrid y viaja a Banyeres de Mariola para pasar el verano en casa de su abuela. Este es el punto de partida para contar las aventuras de este crío con su amiga Candela y su perro Patuchas, una historia para niños como otras muchas con la salvedad de que el protagonista es ciego de nacimiento. Colores es el título de este cortometraje y futura serie infantil, Arly Jones y Sami Natsheh sus directores, y el procurador alicantino José Antonio Saura, el productor mecenas que ha invertido su dinero -más de 50.000 euros- en animar esta historia.

El proyecto, iniciado hace un año y ya en el montaje final, fue un encargo personal de Saura al ilustrador de Callosa de Segura Arly Jones y al cineasta alicantino Sami Natsheh, que trabajan juntos en el equipo de animación Cabeza Voladora, con la idea de formar un estudio estable de animación en Alicante: Horizonte6quince.

José Antonio Saura ya coprodujo con anterioridad un largometraje del realizador Pablo Aragües ( Novatos) y esta vez quería poner la primera piedra para impulsar la animación audiovisual en Alicante. Qué llevó a un profesional del Derecho a zambullirse en el cine lo explica él mismo: «Fue a raíz de una enfermedad que sufrí hace tres años, necesitaba poner distancia con mi trabajo actual y buscar alguna cosa que me quitara el estrés de encima y me relajara. Siempre me ha gustado la creatividad y el audiovisual y quise iniciarme en algo que debería haber hecho hace 35 años y no pudo ser», apunta el productor, que añade que la conexión con el mundo de ficción «para mí es una liberación, una forma de olvidarme de lo negativo y la energía para seguir haciendo cosas».

El procurador, de 59 años, quería contar una historia de animación infantil diferente, sin persecuciones ni tiros, «rica en valores, que dijera algo más», que también pusiera el foco en la diversidad «para hacer visibles a personas que son invisibles para nosotros, como un niño ciego», y ambientarlo fuera de la ciudad y de las cuatro paredes en las que habitualmente juegan los niños con consolas o videojuegos: «¿Por qué no ambientarlo en un pueblo de la provincia?», se pregunta el productor, cuyo equipo eligió Banyeres, localidad de L'Alcoià de origen árabe, con mezcla de culturas y gran riqueza paisajística.

Arly Jones y Sami Natsheh dieron forma al argumento que plasmaron en dibujos de forma artesanal coordinando un equipo «que en ocasiones alcanzó las veinte personas». En septiembre comenzaron el trabajo y plasmaron en un storyboard la historia, «con el empeño de que no fuera ñoña ni sensiblera» y con especial atención al mundo que el niño percibe y las enseñanzas que de él también se derivan.

Para ello han empleado una animación «muy expresiva, en clave muy neutra para que se vean bien las escenas, con doce fotogramas en cada segundo, alejado un poco de esa explosión de lo sintético que se lleva ahora», señala Jones, que recuerda que Picasso decía que «cuando dibujas muy bien tienes que volver a dibujar como si fueras un niño».

Los 15 minutos de Colores se presentarán próximamente en el Festival de Cine de Alicante, un certamen que Saura considera que «hay que apoyar». El corto es también piloto de una serie que prevé contar con 12 capítulos, de los que ya se han elaborado los preguiones -la mitad de aventuras ambientadas en Madrid y la otra mitad, en Alicante-. Como serie, se presentó a la convocatoria de contenidos de la futura televisión autonómica y quedó en primer lugar en su categoría.

Saura, además, ha animado a algunos allegados, como el economista Pepe Cantó y el abogado Luis Fernando Alonso, a implicarse en la producción «de esta aventura, porque eso es esto».