¿Somos lo que escuchamos? Desde que surgió la música, los gustos de cada uno han definido en muchos sentidos la personalidad de cada uno. Los hippies escuchaban folk, psicodelia y rock progresivo, los 'emos' rock y pop gótico y oscuro. Muchos movimientos sociales han tenido su propia banda sonora.

Sin embargo, no parece claro que nuestros gustos musicales definan cómo somos. Tan solo escuchamos lo que representa mejor nuestros ideales vitales o políticos. Ejemplo de esto son los aficionados al heavy metal, cuya personalidad está en muchos casos lejos de la violencia y dureza que suele asociarse a este género. Así lo demuestra un estudio que hizo la Universidad de Heriot-Watt, que dio como resultado que muchos son personas pacíficas y amables.

Esta misma encuesta, realizada a un total de 37.000 personas por Internet, destacó que esos mismos seguidores al heavy metal tenían una personalidad muy similar a la de los fans de la música clásica. De este modo, aunque existan grandes diferencias en los estilos musicales, los perfiles psicológicos pueden ser parecidos entre las personas.

Una conclusión similar sacó la Universidad de Queensland (Australia) en 2008. Los investigadores F. Baker y W. Bor respaldaron las teorías a las que llegaron A.C. North y D.J. Hargreaves en 2005; y descartaron, por ejemplo, que la música sea causa de que alguien sea antisocial. Al contrario, según esta investigación, identificarse con un estilo musical concreto indica vulnerabilidad emocional.

Datos del estudio de North y Hargreaves

Los amantes del blues tienen una alta autoestima y acostumbran a ser personas creativas, amables y extrovertidas.

Los seguidores de los estilos jazz o soul los definen de la misma manera que a los del blues.

Los que disfrutan más con el rap o la ópera obtienen adjetivos similares también. Las personas que prefieren la música clásica tan solo varían en que son más introvertidos que los anteriores.

En el caso de los amantes del country, son personas trabajadoras y extrovertidas.

Por otro lado, los que prefieren los ritmos reggae son vagos, pero al mismo tiempo son creativos, amables y extrovertidos, y también tienen la autoestima alta.

Los aficionados a la música "indie" disponen de una autoestima más baja y son personas creativas, pero poco trabajadoras y amables.

Y los fanáticos del rock y el heavy metal también tienen baja autoestima, son personas creativas, introvertidas y amables, aunque no demasiado trabajadoras.