La SGAE hizo ayer «historia» y pone fin a una «época que ha traído demasiadas cosas que no son bonitas y que no se merece una entidad que tiene 120 años», según su presidenta, Pilar Jurado, después de que dos tercios de los socios diera el sí a los nuevos estatutos.

La Sociedad General de Autores y Editores sacó adelante, tras cuatro intentos, esta reforma estatutaria propuesta por Jurado con 22.070, el 85,19%, de síes; 3.323 noes, el 12,383%, y 514 votos de abstención de un total de 25.907 en los que ha predominado el voto electrónico. «Esto demuestra que todos los socios tienen claro que esta entidad tiene que seguir viviendo, que nos merecemos esta entidad y que queremos que sea cada vez mejor».

El Ministerio de Cultura tendrá tres meses para confirmar que este nuevo reglamento se ajusta a los cambios introducidos en la Ley de Propiedad Intelectual, derivados de las exigencias europeas. En este sentido, fuentes del ministerio informaron de que tras esta votación la SGAE ha dado «el primer paso» para cumplir el primero de los tres puntos que incluye el apercibimiento que se le envió en 2018.

Pero les «recuerda» que los otros dos pasos a dar que establece el apercibimiento son: rehacer el reparto de derechos de autor de 2018 de acuerdo a los principios de equidad y proporcionalidad; y convocar elecciones de los órganos de Gobierno a la mayor brevedad con todas las garantías que establece la Ley.