n La muerte Kirk Douglas deja a Hollywood huérfano de una de sus mayores leyendas, el último superviviente de su época dorada, aquella que le convirtió en un icono. Desde celebridades de su propia familia, como su hijo Michael Douglas y su nuera Catherine Zeta-Jones, a cineastas de la talla de Steven Spielberg o instituciones como la Academia de Hollywood riendieron ayer homenaje al actor, que fue un referente para toda una generación dentro y fuera de la gran pantalla. «Adiós a una leyenda de Hollywood», escribió la Academia en sus perfiles oficiales, con una fotografía de Douglas en Espartaco (1960) y una cita del intérprete en la que hablaba sobre su pasión por la actuación.La mala noticia se apoderó de las conversaciones durante los preparativos para la ceremonia de los Óscar del domingo, que previsiblemente incluirá una mención al fallecido. En ese momento, su hijo Michael publicaba unas palabras: «Para el mundo, fue una leyenda, un actor de la edad dorada del cine (...), un ser caritativo cuyo compromiso con la justicia y las causas en la que creyó sentaron un estándar al que aspirar todos. Pero para mí y mis hermanos era simplemente papá». Poco después, Zeta-Jones le decía «te amaré por el resto de mi vida, ya te extraño», con una foto en la que aparece dándole un beso. Spielberg alabó que Douglas conservara «su carisma de estrella de cine hasta el final de su maravillosa vida».«Me honra haber sido una pequeña parte de sus últimos 45 años. Extrañaré sus notas escritas a mano, cartas y consejos paternos, y su sabiduría y coraje -que van más allá de un trabajo tan impresionante- son suficientes para inspirarme para el resto del mío», aseguró el cineasta. El actor Rob Reiner lo situó «para siempre en el panteón de Hollywood».