La crisis sanitaria derivada de la expansión de la covid-19 podría haberse previsto según una película, Contagio, de Steven Soderbergh, rodada en 2011. Se basó en la pandemia de la Gripe A que se propagó dos años antes, pero la expansión del virus y el nivel de afectación bien podría identificarse con la covid-19 que mantiene en jaque a todo el planeta. "Nada se expande como el miedo", reza el eslogan de la película.

El filme, que se puede ver en HBO, relata la expansión de un virus por todo el planeta pese a que nació en China, para el qe no hay ni protocolo ni vacuna. Más en concreto, coincidiendo con la realidad, surge de un murciélago que lo transmite a un cerdo. De ahí, a los humanos a través de la cocina y la primera persona contagiada, Beth Emhoff (Gwyneth Paltrow) lo lleva de Hong Kong a Estados Unidos.

Allí comienza a propagarse tal y como lo hemos visto en España, aunque en la película el coronavirus es mucho más letal que aquí. Los protocolos que se aplican son los decretados en la realidad: confinamiento de ciudades y cierre de toda la actividad comercial e industrial. Las colas en los supermercados son la tónica diaria y en el filme se producen saqueos, también en las farmacias, algo que no ha sucedido en Europa.

Lo que sí se ha podido ver, y destaca también en el filme, es la apertura de fosas comunes para poder enterrar a todas las víctimas del virus. En Nueva York tuvieron que habilitar un espacio en la isla de Hart para poder sepultar a los fallecidos.

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Tampoco existe un medicamento que cure el virus. También entonces surgen bulos e informaciones contradictorias hasta que se encuentra una vacuna para combatirlo, pero el problema es cómo suministrarla y a quién. "El primer día hubo dos personas, luego cuatro y luego 16; en tres meses, 1.000 millones: eso es a lo que nos enfrentamos", explica el personaje interpretado por Jude Law en la película, el periodista Alan Krumwiede.

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La producción es más lenta de lo que avanza el virus por lo que las autoridades americanas deciden hacer sorteos para determinar quién se vacunará antes utilizando los días de nacimiento de cada ciudadano.

Una vez las personas tienen acceso a la vacuna o bien demuestran que son inmunes, tienen acceso a una pulsera con la que tienen libertad de movimiento. En el caso contrario, el confinamiento se alarga hasta que tengan acceso a la cura.

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La película ha arrasado en la plataforma por las grandes similitudes que muestra con la realidad: la expansión del virus, el caos y colapso sanitario, el papel de las fuerzas y cuerpos de seguridad, los investigadores en busca de la vacuna y la tensión social por el temor a ser contagiado y por acceder a la vacuna que cure la enfermedad y la prevenga.

Aunque desconocemos cómo evolucionará el coronavirus covid-19, lo cierto es que el largometraje da algunas claves de en qué podría derivar esta situación.