Casi dos años han pasado sin que el Ayuntamiento de Alicante haya dado una solución a la cancelación de la deuda de 900.000 euros que arrastra el Principal de Alicante. Y más de un año desde que se habló de sacar a concurso la plaza de director del teatro. Hasta ayer, cuando el alcalde, Luis Barcala, en una convocatoria telemática del Consejo de Gobierno y la Junta General -que tampoco se reunían desde hacía más de un año- anunció que iba a pedir un informe a los servicios jurídicos para poder acabar con el déficit y, además, tener la solución antes de que finalice el mes.

La aparente celeridad con que se plantea ahora la solución no se corresponde con la pasividad con que se ha abordado el tema durante todo este tiempo, encallado desde que la Generalitat entró como nuevo propietario en el teatro alicantino, con una aportación de 3 millones de euros en diciembre de 2018. El problema se encuentra en que la escritura se registra que ese montante tiene que ir a parar a la rehabilitación del coliseo, pero no dice nada de eliminar la deuda. Un escollo legal que casi dos años después no se ha solucionado, aunque parece depender solo de un informe jurídico.

La propuesta fue aprobada por el Consejo de Gobierno, que reunió virtualmente al alcalde y al concejal de Cultura, Antonio Manresa, por parte municipal; a Jaime Matas y Miquel Molins, en representación del Banco Sabadell, y a la secretaria autonómica de Cultura, Raquel Tamarit, y al director del Instituto Valencià de Cultura, Abel Guarinos (sin voto), por parte de la Generalitat. Una vía ante la que Tamarit manifestó su satisfacción «porque van a dar solución a una deuda que el teatro ha contraído antes de entrar nosotros».

Durante el encuentro virtual, los propietarios se emplazaron también para una reunión de trabajo en el mes de noviembre, con el objetivo de perfilar las bases para la elección del nuevo director del Principal, función que desarrolla en la actualidad María Dolores Padilla como subdirectora. Una decisión que también fue aplaudida por Tamarit, ya que el IVC presentó hace más de un año un borrador para el concurso de esa plaza, que fue rechazada por el Ayuntamiento aunque no se llevó ni siquiera a discusión. Entonces, el concejal de Cultura, Antonio Manresa, anunció que su equipo estaba trabajando en una nueva propuesta, pero nunca ha visto la luz.

Más presupuesto, en el aire

Otro tema que se trató fue la posibilidad de incrementar las dotaciones económicas para el teatro, que actualmente se cifran en 140.000 por cada propietario. Sin embargo, ese aumento de asignación quedó pospuesto para el próximo año, ya que el Ayuntamiento esgrimió que para ello tendría que hacer una modificación de presupuesto. Tampoco se concretó de cuánto sería dicho aumento.

En este sentido, Raquel Tamarit afirmó que una vez realizada la reunión y aprobado el presupuesto de 2020, la Generalitat «va a activar el pago de nuestra partida de 140.000 euros» para el presente ejercicio.

En la Junta General, sí lanzó el guante con una cifra la portavoz adjunta del grupo municipal socialista, Trini Amorós, que puso sobre la mesa la cantidad de 200.000 euros por propietario, con lo que se alcanzarían los 600.000 euros, «tal como era antes de 2012, cuando lo recortó el Partido Popular, y única razón por la cual entonces no había déficit».

El incremento de presupuesto se aplaza al próximo año, mientras en 2019 hubo un superávit de 13.000 euros

También se aprobaron por unanimidad las cuentas del Teatro Principal presentadas por Padilla, según apuntó Manresa, que destacó el ambiente «de cordialidad» de la reunión. Las del año pasado se cifran en 2.712.000 y las de este año en 1.103.000. El concejal resaltó además que en 2019 se esquivaron los números rojos y se registró un superávit de 12.984,26 euros y un aumento de 15.000 espectadores.

Tras el Consejo de Gobierno, se celebró la Junta General, por lo que se incorporaron Trini Amorós, por el PSOE, que se abstuvo en la votación para aprobar la programación 2021-2022; Xavi López, de Unidas Podemos, que también se abstuvo en este punto; Eva Coscollá, subsecretaria de la Conselleria de Educación; Abel Guarinos, en quien delegó el voto Roberto García, director adjunto de Artes Escénicas del IVC que no pudo asistir, y Alicia Garijo, delegada del IVC en Alicante.

Actualizar la figura jurídica

El equipo municipal socialista pidió tras la Junta General que se actualice la figura jurídica del teatro, ya que es una Comunidad de Bienes. «Su funcionamiento se basa en unas normas poco precisas y totalmente insuficientes». Trini Amorós insistió en que en la memoria artística el 90% de la programación «la realizó el anterior director -Paco Sanguino, actual portavoz municipal socialista-, tal como le pidieron en 2018 como consecuencia de la compra del Teatro por parte de la Generalitat. Nos congratulamos con que esa programación haya supuesto aumentar en 15.000 espectadores».

Además, Amorós pretende solicitar una mayor participación de los artistas de la ciudad, de la provincia y la Comunidad Valenciana, como ha sucedido hasta la marcha del último director, Paco Sanguino, en los que el Principal ha sido considerado el teatro más valorado de la Comunidad Valenciana y la tercera institución cultural de la Comunidad Valenciana. Ahora se encuentra entre el séptimo y la undécima institución respectivamente».

Por su parte, el grupo municipal de Compromís, que volvió a denunciar» la cacicada de Barcala» de mantener su exclusión de la Junta, calificó de «despropósito» y «burla» que el bipartito «no haya avanzado nada en un año y medio en los dos problemas que debe resolver: el desbloqueo del pago de la deuda de 900.000 euros y la inversión de la Generalitat de 3 millones de euros para la rehabilitación, así como el proceso de elección de la nueva dirección».

El portavoz de Compromís, Natxo Bellido, considera « intolerable» que «la pareja Barcala-Manresa haya acudido con las manos vacías a la reunión, sin soluciones, y haya vuelto a posponer, un mes dicen, la presentación de soluciones».