Mariano Sánchez Soler (Alicante, 1954) lleva treinta años investigando sobre la familia Franco y las ramificaciones económicas de cuarenta años de dictadura. Los ricos de Franco, que Roca Editorial lleva hoy a las librerías, se suma a la media docena de libros sobre este asunto del escritor y periodista alicantino y actualiza dos anteriores (Ricos por la patria y Los banqueros de Franco) con el fin de «explicar toda la vinculación existente entre la alta política del régimen franquista y la economía», un entramado donde «los empresarios eran a su vez procuradores en Cortes o ministros, o banqueros que eran a su vez presidentes de industrias o directores generales».

Sánchez Soler apunta que esa «red de concentración, la oligarquía económica, se da bajo la dictadura, donde se vincula lo público y lo privado» y se selló bajo una máxima de Aguirre Gonzalo, uno de los banqueros del régimen: «El Gobierno gobierna, la banca administra y el español trabaja», subraya.

El autor mantiene que durante la dictadura siempre se habló de «unas doscientas familias» que construyeron su fortuna: «En esa concentración económica estaban los Aguirre, los Oriol, los Koplowitz, los March, los Carceller, Barrié de la Maza... una serie de empresarios y familias que estuvieron en el organigrama del franquismo. Había falangistas, tradicionalistas, monárquicos y banqueros». Estos, añade, «son los únicos que, tras la posguerra y con una España destruida, tienen dinero para la industrialización del país, y su participación en empresas siderúrgicas y de la construcción es absoluta y total durante el franquismo».

«Yo hablo de la génesis de esas fortunas y de las relaciones directas que tuvieron con el franquismo», indica el alicantino, que considera al poder económico un «pilar fundamental» del régimen y protagonista de un «capitalismo salvaje que aquí llamaron el milagro español» con la llegada del Plan de Estabilización de 1959, «cuando el país se abre a las multinacionales, se plantea el turismo como industria y se produce la emigración del campo a la ciudad, lo que significa que hay que construir casas y organizar una industria urbanística enorme».

Lejos de desaparecer con la muerte de Franco, estas familias, apunta el autor del libro, mantuvieron su poder durante la Transición y la democracia. «En ningún sitio leerás que el capital tuvo una gran convulsión cuando murió Franco o que los poderes económicos emigraron; ellos se instalaron en la democracia», destaca, y añade que tras la muerte del dictador, «en las 25 empresas principales con mayor facturación de España, en todas excepto en una hay un exministro, director general o procurador vinculado a Franco. La penetración de la política franquista fue total».

Otro argumento que pone sobre la mesa Sánchez Soler con Los ricos de Franco es que la corrupción en España se gestó al albur de ese desarrollo. «La posguerra fue una época de un gran estraperlo por parte de la cúpula del poder, que se aprovechó de la posición de élite, y luego estaba el pequeño estraperlo de supervivencia, esa cultura del mercado negro porque no había más remedio para sobrevivir, que en el contexto del desarrollismo se multiplica y la gente cobra en negro de forma natural. Toda la sociedad se encanalló para sobrevivir en una situación de puño de hierro».

Desde la publicación del anterior libro de Sánchez Soler, La familia Franco S.A., se ha producido la exhumación de los restos del caudillo del Valle de los Caídos, un hecho «a celebrar porque es absurdo que el Estado pague un millón de euros al año en mantener un centro de exaltación del franquismo» y que, a su juicio, marca «un punto de inflexión» en la revisión histórica.

Mariano Sánchez Soler presentará el libro Los ricos de Franco en dos pases en la librería 80 Mundos de Alicante, los próximos días 23 y 24 de noviembre a las 19 horas. El aforo será reducido a 20 personas, previa reserva.

Portada del libro.