María Moliner, filóloga, archivera, bibliotecaria, lexicógrafa y autora única de uno de los diccionarios más completos que ha habido en nuestra lengua. Nació en Paniza, un pequeño pueblo situado en Zaragoza el 30 de marzo de 1900.

Se formó en el Estudio de Filología de Aragón, desde 1917 hasta 1921, años en los que colaboró en la realización del 'Diccionario aragonés'. Fue este último año, en 1921, cuando se licenció en Historia por la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Zaragoza, con las máximas calificaciones y un Premio Extraordinario.

El 'doodle' que Google dedicó a María Moliner en 2019.

Inspirada en el 'Learner's Dictionary of Current English" de A.S Hornby (1948), decidió componer su 'Diccionario de uso del español', un proyecto que le llevaría más de quince años de trabajo solitario en casa. En 1955 acabó firmando un contrato para la futura publicación de la obra en la ilustre editorial Gredos, a instancias de su amigo Dámaso Alonso. El 'Diccionario de uso del español' incluye sinónimos, expresiones y frases hechas y familias de palabras. Además, se anticipó a la RAE en cuestiones como la ordenación de la Ll en la L, y la Ch en la C, o términos de uso común que la Real Academia aún no había incluido.

A pesar del laborioso trabajo y de que, aún hoy, estudiantes de letras siguen dando uso al conocido como 'María Moliner', la Real Academia de la Lengua jamás le concedió una de sus butacas. De hecho no fue hasta 1979 cuando Carmen Conde Abellán se convirtiera en la primera mujer en entrar a la RAE ocupando la letra K. En su discurso, la poeta y novelista cartagenera recordó a todas aquellas mujeres silenciadas que debieron entrar antes: "Mi primeras palabras de agradecimiento son de agradecimiento a vuestra generosidad al elegirme para un puesto que, secularmente, no se concedió a ninguna de nuestras grandes escritoras ya desaparecidas. Permitid que también manifieste mi homenaje de admiración y respeto a sus obras".