A finales del pasado año, la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Alicante engrosaba las colecciones municipales con una decena de obras de arte contemporáneo de creadores locales. La importancia de esta compra, por un valor total de 62.300 euros, es su respaldo a los artistas, pero también que esta institución no adquiría nuevas obras desde hacía veinte años.
Desde ayer y hasta el 4 de septiembre, esas piezas se pueden ver en una exposición en la Lonja de Alicante, como parte del patrimonio artístico público para completar las colecciones de la que no formaban parte las nuevas generaciones de artistas o que estaban escasamente representados, como una forma de narrar la historia de las artes visuales en Alicante.
La exposición, inaugurada ayer por el concejal de Cultura, Antonio Manresa, está integrada por las obras Tabacalera II, de Antonio Alcaraz; Un rayo en una caja, de Aurelio Ayela; Sonata naranja, movimiento azul, de Miguel Bañuls; Pantalla mágica, de Ana Esteve Reig; Discurso de incertidumbres, de Daniel G. Andújar; El vigor de los cabellos de Medusa, de Susana Guerrero; Colección de silencios I, de Aurelia Masanet; El lenguaje infinito de la retícula, Poéticas de la contradicción, La arqueología de la metáfora y El desplazamiento interminable del objeto -todas ellas dentro de la serie Deconstrucción en papel- de Luisa Pastor; La Faraona, del Colectivo O.R.G.I.A. y Children’s Corner, de Jesús Zuazo.
Esta convocatoria pública, a la que se presentaron 240 propuestas de 137artistas, tendrá continuidad y el viernes 8 el Boletín Oficial de la Provincia publica las bases de una nueva para este año, con el objetivo de continuar con las adquisiciones de arte.
La cantidad invertida será la misma, alrededor de 60.000 euros, y las bases incluyen que no se podrá adquirir obra de un artista al que se haya comprado piezas en los tres años anteriores.
También varía la composición del comité de valoración, según apunta el concejal de Cultura. Se mantendrán Rosa Castells, conservadora de las colecciones municipales, y Cati Rodríguez, programadora de la Lonja, además de Manresa como presidente, pero se incorporará cada año a un artista y a una artista de los que se haya adquirido alguna obra en la edición anterior.
Para decidir quiénes serán, la próxima semana se convocará a los creadores seleccionados en 2021 y se realizará un sorteo para elegir a esos dos miembros. "Lo que queremos es darle mayor transparencia al concurso", afirma.
Antonio Manresa destaca "el compromiso por parte de la Concejalía en la adquisición de obra de artistas de la provincia, a fin de mostrar su obra, en un espacio municipal como es la Lonja". Y espera que durante el periodo estival, "los alicantinos y visitantes se acerquen a disfrutar de la exposición".
