El Festival Internacional de Cine de Sax clausuró el pasado sábado su decimosexta edición en la la Casa Alberto Sols de esta localidad con la entrega de premios a los trabajos galardonados y el homenaje al cineasta Gonzalo García Pelayo.

El jurado del festival otorgó el premio al mejor proyecto de largometraje al benidormense Alberto Evangelio por su película en desarrollo Desconectada, una road movie entre la ciencia ficción y el cine fantástico. Se da la circunstancia de que este cineasta alicantino ya logró el mismo galardón en la edición de 2019 por su película Visitante, que tuvo una trayectoria destacada en festivales con su estreno mundial en el Festival de Cine de Sitges 2021 y después fue nominada a mejor película en los Premios Gaudí 2021. Visitante, además, fue precisamente la película con la que el festival de Sax inauguró esta recién terminada edición.

El palmarés dio el premio al mejor cortometraje de ficción a Titán, un drama sobre el abuso sexual infantil, de María Salgado Gispert, mientras que el galardón al mejor cortometraje documental fue para la alicantina Pilar Pérez Solano (Goya por Las maestras de la República), con un documental que continúa en la línea de la memoria histórica, Donde el trigo crece más alto. Cabe recordar que los premios en estas dos secciones cuentan en la preselección para los próximos Premios Goya.

El mejor cortometraje de animación fue para Loop, de Pablo Polledri (Argentina) y Alex Rey se alzó con el premio al mejor cortometraje de Alicante con Phonorama, su último trabajo de animación en tono de comedia canalla de ciencia ficción con homenajes al cine de Hitchcock o a las novelas de Isaac Asimov. 

El mejor cortometraje social fue Un pasaje sin regreso, de José Gómez de Vargas (República Dominicana) y el corto en valenciano recayó en Elsa, de Albert Carbó. La Mención Especial fue para Bottle Rocket To Pluto, de Jaime de la Hoz, que se alzó también con el Premio del Público por la Universidad Miguel Hernández de Elche (UMH).