Un mes después de la primera presentación del festival de Sitges 2022, en la que se anunció que el eje temático de esta nueva edición giraría en torno a la seminal película de 1982 ‘Tron’, así como la selección de los últimos filmes de nombres prestigiosos del género, clásicos y modernos, como Dario Argento, Peter Strickland y Quentin Dupieux, además de la apuesta firme por las directoras que practican el fantástico y terror, Ángel Sala, director del certamen, ha comunicado hoy en una segunda rueda de prensa nuevas gemas, en forma de películas y de presencias, para que los amantes del género sigan frotándose las manos.

Por ejemplo, la asistencia al festival de Edgar Wright y Neil Marshall para recibir el máximo galardón honorífico que entrega Sitges, el Premi Màquina del Temps. No está nada mal teniendo en cuenta la incidencia de ambos cineastas británicos en el devenir del fantástico moderno con títulos como ‘Zombies party’ y ‘Bienvenidos al fin del mundo’, dos de las obras más representativas de Wright, el rey del horror cómico –habitual también en Sitges con otro tipo de títulos, caso de ‘Última noche en el Soho’–; y ‘Dog soldiers’ –una excelente revisión del temario de los licántropos–, ‘El descenso’ o la versión de 2019 de ‘Hellboy’, en el caso de Marshall.

La apuesta decidida por el fantástico español iniciada por Sala hace años sigue firme en esta edición con la presencia de una de las revelaciones del último festival de Sundance, ‘Cerdita’, debut de Carlota Pereda con un thriller rural que, en el fondo, tiene poco de thriller rural. También se proyectarán lo último de Rodrigo Sorogoyen, ‘As bestas’, un drama de alta tensión que enfrenta a un matrimonio francés con una comunidad también rural en verdes pero inquietantes paisajes gallegos, y la producción vasca ‘Irati’, de Paul Urkijo, esta en estreno mundial: se trata de una fantasía medieval ambientada en el valle donde las fuerzas ancestrales se aliaron para derrotar a las tropas de Carlomagno. ‘Asombrosa Elisa’ de Sadrac González, ‘Viejos’ de Raúl Cerezo y Fernando González Gómez, y ‘La paradoja de Antares’, del debutante Luis Tinoco, son las otras propuestas españolas anunciadas.

'Folk horror' y Miike

No puede faltar en Sitges algún ejemplo de una de las tendencias más sobresalientes de los últimos tiempos, el ‘folk horror’, representado este año por ‘You won’t be alone’ de Goran Stolevski, otro filme procedente de Sundance en el que Noomi Rapace encarna a una joven convertida en bruja en la Macedonia del siglo XIX. El mundo postapocalíptico tendrá también su ración en el certamen con títulos como ‘Vesper’, de los belgas Kristina Buozyte y Bruno Samper. Sangre y vísceras, a veces con denuncia social, están detrás del filme danés ‘Speak no evil’ y de la producción francesa ‘Le tour’, esta última dirigida por el iconoclasta Guillaume Nicloux, el director que se atrevió a enfrentar entre si hace tres años a Gérard Depardieu y el escritor Michel Houellebecq en ‘Thalasso’.

 Y en cuanto al cine asiático, no hay Sitges sin Takeshi Miike, de quien se proyectará otro filme entre enloquecido, sangriento y paródico, ‘Mole song final’, cierre de su última trilogía. Otro asiduo a Sitges, el documentalista Alexandre O. Philippe, llegará al festival con ‘Lynch/Oz’, un estimulante estudio sobre la fascinación que ‘El mago de Oz’ ejerce en David Lynch: no en vano Isabella Rossellini se llamaba Dorothy en ‘Terciopelo azul’ y en ‘Corazón salvaje’ había hadas buenas y hadas malas y Laura Dern evocaba el camino de baldosas amarillas.