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Una novela da voz a las mujeres que defendieron Alicante en la Guerra Civil

La escritora alicantina Bianca Aparicio Vinsonneau publica "Los compases del tiempo", en la que recorre la ciudad a través de "historias que cuentan la Historia"

La escritora Bianca Aparicio Vinsonneau, en el refugio de la plaza Séneca con su libro. Alex Domínguez

Su abuela vivía en la calle Quintana cuando el bombardeo al Mercado Central de Alicante sesgó muchas vidas. Pero nunca habló de ello. Por eso, la escritora Bianca Aparicio Vinsonneau ha querido ponerle voz en una novela, Los compases del tiempo (Contraluz), y con ella al resto de mujeres que pasaron y combatieron en otro frente de la contienda, el de una ciudad sin apenas hombres en la que tuvieron que asumir la mayoría de roles.

La autora alicantina ha presentado esta mañana su novela y lo ha hecho con un recorrido por los lugares de la ciudad que fueron claves en el desarrollo de la Guerra Civil y también en su libro.

"Aunque hayas estado muchas veces, siempre es sobrecogedor estar en un refugio", ha asegurado la autora tras visitar uno de estos enclaves de la Plaza Séneca. "Pienso que mi abuela estuvo en un refugio también y qué le pasaría por la cabeza".

Bianca Aparicio, que se autoeditó sus dos primeras novelas, Las sombras de África y La isla del Coco, narra "la Historia con mayúsculas a través de historias con minúscula", sobre todo, "las de las mujeres que son las que defendieron esta ciudad. En la primera vierte los datos que ha conseguido a través de investigaciones y búsqueda de documentos. En las segundas, narra la vida de las hermanas Robles que vivían en el barrio de Santa Cruz sin estrecheces y que tienen que aprender a ver el presente y el futuro de otra manera durante la guerra.

La escritora junto a la maqueta del Stanbrook, en el Centro de Interpretación sobre los Refugios Antiaéreos de Alicante. Alex Domínguez

La mayor deja sus estudios como matrona para ayudar en la Casa de Socorro, en la avenida de la Constitución, donde llevaban a los heridos tras el bombardeo del Mercado Central. La segunda es relojera, siguiendo el negocio de su padre, pero pasa a servir en casa de una adinerada familia en la calle Gomis, y la tercera está estudiando y acaba de dependienta en una tienda de ultramarinos en la calle Altamira. Además, se entretejen tradiciones, amor y secretos familiares escondidos en un hermoso reloj.

Son casi 700 páginas de ficción histórica, "con la que quiero arrastrar al lector de un capítulo a otro, de un acontecimiento a otro, para que vaya conociendo los hechos pero sin darse cuenta porque los personajes le van llevando".

La novela empieza el 18 de julio de 1936, fecha del alzamiento militar "que cambió las vidas de muchas personas". En este caso, sobre todo la de "unos personajes femeninos muy fuertes, con mucho coraje, que tienen que salir adelante en una ciudad de mujeres porque los hombres se fueron al frente y ellas tuvieron que trabajar en las fábricas, cuidar a los hijos... la vida les pone a prueba y tienen que descubrir sus capacidades".

Son tres hermanas "muy diferentes" y cada una de ellas "tiene algo de mi abuela porque las mujeres somos maravillosamente complejas y contar lo que quería contar en una solo iba a ser complicado; las tres son muy diferentes y tienen distintas formas de ver el mundo".

Hechos menos conocidos

La ciudad en esta historia "es una protagonista más ", asegura la autora, diplomada en Magisterio y en Óptica y Optometría. Basílica de Santa María, Teatro Principal, Mercado Central, el Casco Antiguo, la Concatedral de San Nicolás, la antigua Casa de Socorro y el puerto desde donde partió el Stanbrook aparecen como escenarios de la vida de sus protagonistas. "He tenido que buscar debajo de las piedras, en archivos, en memorias y con testimonios, y también he procurado que quedarán reflejados hechos menos conocidos".

Como ejemplo, el llamado bombardeo del pan. "Los aviones italianos que soltaban bombas también lanzaron panes envueltos en mensajes fascistas en los que escribían que ellos sí tenían comida, jugaban con minar la moral de la población". También la historia del perro León. "Un perro callejero que estaba siempre entre el Teatro Principal y la Casa de Socorro, al que todo el mundo cogió cariño porque anticipaba los bombardeos antes de que sonaran las sirenas".

Bianca Aparicio, que también ha trabajado en África con diversas ONG, considera trascendental el papel de Alicante en la Guerra Civil, "pero es una ciudad desconocida en ese aspecto y la gente no sabe que pasaron muchas cosas aquí que cambiaron nuestro presente".

Los compases del tiempo se presenta mañana viernes, a las 19.30 horas, en la Biblioteca de Guardamar del Segura.

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