Los lazos que unen Alicante con una ciudad de una popular saga de fantasía

Una metrópoli que forma parte de un conocido universo literario de ficción, también llevado al cine y a la televisión, comparte nombre con la capital alicantina

Una imagen aérea de Alicante junto a un fotograma de la película Cazadores de sombras: Ciudad de hueso, inspirada en la saga literaria creada por Cassandra Clare

Una imagen aérea de Alicante junto a un fotograma de la película Cazadores de sombras: Ciudad de hueso, inspirada en la saga literaria creada por Cassandra Clare / INFORMACIÓN

Dividida por el río que la atraviesa, rodeada por altas torres y vertebrada a partir de su núcleo central, la Plaza del Ángel. Así es Alicante. Cualquier vecino de la ciudad, visitante habitual, conocedor de la zona o simplemente, persona con un conocimiento básico de la geografía nacional se habrá quedado ojiplático al leer esto. O eso, o estará pensando que el autor de esta publicación ha sufrido algún tipo de alucinación que le está provocando una distorsión de la realidad. Pero nada más lejos de la misma.

No se trata de ningún error ni nada parecido. La descripción detallada en las primeras líneas coincide plenamente con el paisaje y la estructura de Alicante, pero no la Alicante en la que que la inmensa mayoría pensamos. La ciudad a la que en este caso nos referimos y que comparte topónimo con la capital provincial (y por supuesto, con la propia provincia) es una metrópoli que forma parte de un popular universo de ficción.

En concreto, la urbe pertenece a la saga literaria Cazadores de Sombras, de la autora Cassandra Clare y cuyo primer libro fue llevado en 2013 al cine, pero la película no recaudó lo suficiente y la historia se quedó sin continuidad en la gran pantalla. Más suerte tuvo en la televisión, donde la ficción fue adaptada en 2016 con su título original en inglés: Shadowhunters.

La serie duró 55 capítulos, repartidos en tres temporadas (la última dividida en dos partes), y llegó a gozar de buenos datos de audiencia. Sus derechos fueron adquiridos por Netflix, que seguramente vio en ella, y en su trama amorosa en medio de un mundo con criaturas fantásticas, una buena apuesta para ser un fenómeno entre el público juvenil, que finalmente no pudo ser. A pesar de que aún forma parte del extensísimo catálogo de la plataforma, la serie fue cancelada hace ya varios años y no tuvo el amplio recorrido que sí tienen las novelas.

Y es que hasta 24 volúmenes componen un prolífico universo del que se han vendido decenas de millones de copias en multitud de idiomas. Pero es solo en la edición española donde el nombre de una de las ciudades que conforman la saga tuvo que ser modificado. ¿El motivo? Evitar una curiosa coincidencia.

El Grupo Planeta, empresa responsable de la distribución de los libros en los países castellanohablantes, decidió que Alicante, capital de Idris, conocida también como la Ciudad de Cristal, pasara a llevar el nada sospechoso nombre de Alacante. Así la conocen los lectores de habla hispana; para el resto del mundo, la que también es la ciudad natal de los cazadores de sombras recibe el mismo nombre que "la millor terreta del món".

Detrás esta casualidad, lo cierto es que no hay ninguna razón de peso. Simplemente, el impulso creativo y, como se suele decir, el deseo de las musas provocaron que a la autora le pareciera que Alicante es "una palabra muy bonita", por lo que la "tomó prestada". Así lo desveló en una entrevista concedida en 2010, en la que reconoció que nunca había pisado hasta ese momento suelo alicantino, y en la que también explicó que "todos los nombres de los lugares que aparecen en el libro son reales. La idea es que, seas de donde seas, puedas encontrar algún nombre que te sea familiar".